La Federación de AAVV de Marbella y San Pedro Alcántara ha decidido en una asamblea, celebrada este lunes, que no participará en la votación de los llamados ‘Presupuestos Participativos’, que ha puesto en marcha la delegación de Participación Ciudadana. Así lo ha hecho público este martes, a través un comunicado, su presiente, Manuel Sánchez.
Así pues, justifican su no participación en la votación del sistema de elección de las llamadas inversiones sostenibles, provenientes del remanente del 2015, en que “este procedimiento es un sin sentido, al votar algo que se ha decidido de antemano”. Exponen que “votar la prioridad no es democracia real, ni participativa”.
A juicio de este colectivo vecinal “no ha existido consenso y no se han tenido en cuenta las propuestas que los vecinos entregamos en el Consejo Sectorial de Participación Ciudadana en septiembre del 2015”, ya con el tripartito gobernando desde junio de ese año.
El sistema de votación es para esta federación “sectario”, al no ser “abierto e igualitario”. Creen, además, que se limita el voto sólo a los que dispongan de ordenador, conocimientos informáticos y se registren por internet. “¿Quién y cómo contabilizaría y controlaría los resultados?”, se preguntan en voz alta.
No les parece suficiente el plazo de diez días, en agosto, “con escasa publicidad”, por lo que creen que se hace sólo para “cubrir el expediente participativo”.
La Federación establece una comparación con el pasado, sin nombrar al PP, no exenta de críticas: “se está gobernando, como antaño, de manera totalmente centralizada, enmascarada de “universalidad”, obviando que Marbella es municipio de Gran Población donde los Distritos deben adquirir mayores competencias a través de las Juntas Municipales de Distrito”.
“Después de catorce meses en el gobierno municipal y tras dejar inoperativa la división territorial de nueve distritos, seguimos sin el nuevo Reglamento de Distritos y sin la puesta en marcha de los cinco anunciados”, señalan en referencia a la gestión del teniente de alcalde Miguel Díaz (IU).
Concluyen con una aclaración: no están en contra del nuevo sistema de participación individual, sino con que del mismo se derive el desmantelamiento paulatino del movimiento asociativo vecinal, con estructura legal, sometido a un control que asegura a los vecinos su participación y transparencia y brindando unos canales de debate y discusión que de otra manera individual es imposible”, sentencia el comunicado.