El presidente de los urbanizadores, Ricardo Arranz, junto al secretario de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Antonio Carrillo, en imagen de archivo
El presidente de la Federación Andaluza de Urbanizadores y Turismo Residencial, Ricardo Arranz, ha sido contundente a la hora de analizar el fallo del Supremo que anula el PGOU de Marbella de 2010. En declaraciones a este medio digital, el propietario del Hotel Villapadierna sostiene que el Plan anulado por el alto tribunal “no tenía ninguna seguridad jurídica”.
“Creo que la sentencia es muy importante y clara para un Plan que todos sabíamos imposible de gestionar”. De hecho, afirma el empresario, “llevamos diez años prácticamente sin que el Ayuntamiento de Marbella haya podido dar ninguna licencia clara”.
Arranz recuerda que el pasado año, durante el International Property Show, dedicado al sector inmobiliario, se llevaron a cabo unas jornadas sobre el futuro urbanístico de Marbella “y nos dimos cuenta de que no había ningún interesado en exponer sus productos, porque no había seguridad jurídica ni licencias”.
Duras críticas contra el equipo redactor de Fustegueras
El promotor burgalés lanza duras críticas contra el equipo redactor de Fustegueras, autor del Plan, así como contra el gobierno que encabezó la ‘popular’ Ángeles Muñoz: “quisieron tapar las irregularidades del Ayuntamiento anterior compensando zonas urbanizables programada por zonas que pasaron a no urbanizables y esas irregularidades y faltas jurídicas traen consigo esta sentencia tan clara para que el Plan se anule”.
Arranz considera que la resolución judicial conocida este miércoles da paso a una “situación muy complicada” porque, afirma, “llevamos un año y medio recibiendo inversores y fondos de inversión que no cuajan, porque todo el mundo se da cuenta de la inseguridad jurídica que da Marbella”. Una circunstancia que, a su juicio, “nos está evitando mucha creación de riqueza y empleo”.
Reacción a las primeras declaraciones del alcalde
Al ser preguntado por las primeras declaraciones del alcalde, José Bernal, en las que el regidor ha asegurado que garantiza a los inversores “total seguridad jurídica”, Arranz responde que “ahora mismo el Ayuntamiento y la Junta tienen la responsabilidad clara de iniciar y desarrollar un sistema para que Marbella, en una situación de salida de crisis no se quede rezagada por falta de responsabilidades anteriores”.
El presidente de los urbanizadores se muestra especialmente beligerante, como en otras ocasiones contra el arquitecto redactor del PGOU, Manuel Ángel González Fustegueras, y su equipo: “este estudio de arquitectura hizo un Plan sin conocer perfectamente lo que era el mercado de Marbella, ni lo que iba a ser el futuro de la ciudad, algo que estamos pagando ahora todos”, denuncia Arranz.
Anima al Ayuntamiento y la Junta a “tomar la batuta”
Como conclusión, cree que sería muy importante la labor conjunta de Ayuntamiento y Junta para “tomar la batuta y dar la seguridad de que esto va a tener solución”. A juicio del empresario ambas instituciones deben dar una respuesta a la “importantísima industria del turismo residencial y convencional”, para dejar claro que “no se va a desaprovechar este momento de salir de la crisis”. Para Arranz sería “una declaración positiva e importante, que todo el mundo desea escuchar”.
En cuanto a la posibilidad de elaborar un nuevo PGOU desde el Consistorio, tras anularse el de 2010, el presidente de los urbanizadores contempla este escenario como “complicado”. Se basa en que “al haber un gobierno cuatripartito [incluye a Podemos] indudablemente hay muchos intereses contrapuestos que van a llegar consigo muchas discusiones”. En base a ello, Arranz opina, al margen de analizarlo con más detenimiento, que sería “la propia Junta de Andalucía la que debería tener esta responsabilidad” de diseñar un nuevo Plan General.
