“Le dije en tres ocasiones al señor García Urbano que no le íbamos a comprar el edificio”. Así de rotundo se ha mostrado el exalcalde de Marbella, José Bernal, a la hora de desmentir la versión ofrecida por la delegada de Urbanismo, Kika Caracuel, sobre que el exregidor del PSOE inició un proceso negociador con el alcalde de Estepona, socio de la empresa propietaria del edificio que el actual gobierno local marbellí pretende adquirir.
En declaraciones a Marbella Confidencial, durante una conversación telefónica mantenida en la noche del miércoles, el exprimer edil (2015-2017) fue muy claro: “Yo no he negociado nunca con el señor García Urbano, porque una negociación es cuando las dos partes intentan buscar un punto de acuerdo”.
Bernal aclara que tuvo “dos reuniones” con el político del Partido Popular, mientras que la exedil de Urbanismo del PSOE, Isabel Pérez, “tuvo una más”. Las tres citas, aclara el actual edil opositor, fueron “a petición del señor García Urbano”.
Según esta versión, el alcalde de Estepona propuso a su homólogo que “el Ayuntamiento de Marbella comprara el resto del edificio de Urbanismo y la respuesta por mi parte y la de la concejala de Urbanismo fue que no”.
Los exgobernantes consideraron que “no era el edificio adecuado y tampoco era nuestro ínterés comprarlo, porque estábamos viendo llevarnos Urbanismo a un edificio mucho más funcional”.
Así pues, insiste Bernal, “no hubo ningún tipo de negociación, sino una negación ante una oferta que nos llegó a hacer tres veces el señor García Urbano”. Una de las veces, incide el edil socialista, “me trasladó que si nos negábamos a la compra de ese edificio tomarían medidas para recuperar las oficinas cedidas al Ayuntamiento, a causa de la regularización del Plan General de 2010”.
García Urbano le trasladó al entonces alcalde de Estepona que “al haberse anulado el Plan de 2010 su edificio quedaba en una situación ilegal y, por tanto, esas oficinas ya eran propiedad suya”.
La respuesta de Bernal ante la amenaza sobre acciones judiciales contra él, así como la delegada de Urbanismo, fue que “nosotros defendíamos los intereses generales y que no íbamos a llevar a cabo ninguna negación de tintes personales como la que estaba solicitando el señor García Urbano”.
El actual líder de la oposición concluye que “el señor Urbano se lo ha ofrecido a la señora Muñoz y a algún tipo de acuerdo habrán llegado”, dice en alusión a la alcaldesa.
Bernal, ha ratificado este jueves las declaraciones a Marbella Confidencial, y ha agregado que la figura jurídica a través de la cual el bipartito adquirirá el inmueble es un “convenio expropiatorio” lo que, ha señalado, forzaría al Ayuntamiento a hacerse de forma obligatoria con el edificio aunque quiera retirarse de la negociación.
El edil del PSOE ha señalado que ésta fue una figura jurídica a la que recurrieron con asiduidad los gobiernos del GIL. “Al PP se le ha caído el prefijo ‘neo-‘ y ahora ya es directamente gilista”, ha agregado.