No se puede hablar de los llamados cien días de cortesía, porque desde el minuto cero el Partido Popular arremetió sin tregua, desde su nuevo papel en la oposición, contra el nuevo equipo de gobierno tripartito constituido el 13 de junio. Una vez transcurridos estos tres primeros meses es hora de hacer balance de unos gobernantes (PSOE, OSP, e IU) que han cosechado las críticas generalizadas de la ciudadanía por la limpieza de las calles y la recogida de basuras.
Francisco García, voluntarioso concejal de Limpieza del PSOE, se ha quejado de la herencia recibida desde el PP, con máquinas inutilizadas y sin plan de transición de poderes. Son excusas que no parecen haber sido entendidas por la mayoría de los vecinos. Su principal queja ha sido hasta ahora la suciedad de las calles y la basura acumulada. Muchos habitantes se han preguntado por qué no era posible actuar de forma más contundente contra la suciedad durante el periodo estival.
Aplazamiento de la deuda con la Junta
El aplazamiento de la deuda contraida con la Junta de Andalucía, por el anticipo reintegrable de 100 millones otorgado a la Comisión Gestora, es uno de los logros conseguidos por Bernal. Raro hubiera sido que El Ejecutivo autonómico, del mismo signo político, no aceptara la propuesta.
La transparencia es otro de los asuntos en los que se ha avanzado, pero aún queda camino por recorrer. Los ciudadanos tuvimos que conocer los nombres y los sueldos de los nuevos cargos de confianza gracias a los concejales de la marca municipal de Podemos, Costa del Sol Sí Puede (CSSP). Ellos colgaron en su página web el listado. Tuvieron que pasar unas cuantas semanas hasta que el equipo de gobierno lo hizo. La última petición loable de José Carlos Núñez ‘Kata’ y Victoria Mendiola se refiere a difundir también en la web municipal los contratos menores del Ayuntamiento.
Policía Local y Turismo
Si analizamos dos de las áreas que lleva personalmente el alcalde: Seguridad Ciudadana y Turismo, en la primera de ellas, de la que depende la Policía Local, cabría preguntarse si era el momento, nada más tomar posesión, de abrir el melón de la sucesión de Rafael Mora como jefe policial, así como el hecho de plantear la posible vuelta del exjefe del cuerpo, Rafael del Pozo, condenado en el ‘caso Malaya’.
Resulta indudable el descontento generalizado con Mora en la plantilla policial, plasmado a través de cinco sindicatos. Ahora habrá que ver si la llegada del nuevo responsable, José Andrés Montoya, proveniente de Vélez-Málaga, apacigua los ánimos.
Los hosteleros demandan contacto directo con el alcalde
En Turismo, otra área fuerte en manos del primer edil, destacaron varias visitas en un breve espacio de tiempo del titular de la cartera en la Junta, Francisco Javier Fernández. Por el contrario, distintos hosteleros, especialmente de la planta hotelera, echan en falta el contacto directo con Bernal, como delegado de Turismo, para trazar estrategias y sinergias con el Ayuntamiento. No consideran suficiente que el alcalde delegue en Miguel Luna para tratar con ellos.
Urbanismo, el área más elogiada
La delegación de Urbanismo ha sido, sin duda, una de las grandes beneficiadas con el cambio de gobierno. De tener un concejal delegado imputado, como Pablo Moro, se ha pasado a una delegada como Isabel Pérez, que ha abierto las puertas de su despacho de par en par, para que entre aire fresco.
Los promotores destacan la agilización de los proyectos, algunos bloqueados por la cerrazón de Ángeles Muñoz. Tal es el caso de los 150 millones de inversión para la zona este de Los Monteros. La promotora de viviendas de lujo se marchaba porque la entonces alcaldesa pretendía construir un circuito de motocross al lado. Bernal, vía decreto, lo anuló nada más llegar a la Alcaldía.
Podemos, un socio cómodo
Hasta ahora el equipo de gobierno ha contado con un socio cómodo, como Podemos, que ha votado siempre en sintonía con ellos, pero en el seno del tripartito reconocen cierta inquietud ante las dos reuniones mantenidas por CSSP con el PP, en las que los conservadores les pidieron su apoyo, traducido en votos para bloquear al equipo de gobierno en el Pleno.
No menos inquietante para los gobernantes resulta el hecho de que el portavoz de la marca municipal de Podemos, ‘Kata’ Núñez, declarara días atrás, en una entrevista con Marbella 24 horas, que su formación podía llegar a “acuerdos puntuales” con el Partido Popular.
Miguel Díaz, el hombre fuerte
Si hay algo que ha quedado meridianamente claro tras estos cien días de gobierno municipal es que el hombre fuerte del tripartito es el teniente de alcalde de IU Miguel Díaz. Las áreas que controla, especialmente la de Movilidad y Sostenibilidad son mediáticas y él sabe venderlas bien.
Si a lo anterior añadimos que Díaz es periodista y tiene el control de la Radio Televisión municipal, el resultado es que en los informativos del medio predominan las noticias relacionadas con las delegaciones de Izquierda Unida.
Otro asunto que le ha generado a Díaz gran predicamento, entre el numeroso colectivo ciclista, es la habilitación del Paseo Marítimo para las dos ruedas, hasta ahora vedado por mandato del PP. Al final todos son votos que rentabilizaría IU.
Piña, en un estudiado segundo plano
Por lo que respecta a OSP su líder natural, ahora vicepresidente del partido, Rafael Piña, ha quedado en un estudiado segundo plano. Su proyección, buscada como tal porque no quiere abarcar más, acaba en los límites de San Pedro, donde actúa como un alcalde al uso, al tener el control total de la Tenencia de Alcaldía y con un PSOE que ni está ni se les espera, por el momento.
Piña sale menos en los medios que su compañero de filas y delegado de Hacienda, Manuel Osorio. Una curiosa paradoja ésta si se compara con el protagonismo que siempre ha tenido el cabeza de lista de OSP, especialmente en las negociaciones del pacto, tras las elecciones municipales, donde se convirtió en una estrella mediática.
El teniente de alcalde sampedreño parece sentirse cómodo en su papel y al menos aparece en medios con presencia en San Pedro, de carácter privado, como M95 y la productora San Pedro Plural TV, que ha puesto en marcha su hijo y miembro de la dirección de OSP, Antonio Manuel Piña.
Política de comunicación municipal
Si hablamos de la política de comunicación del tripartito también sería éste un aspecto a mejorar. Resulta llamativo que en numerosas ocasiones, durante estos cien días, no hayan respondido a las críticas del PP por medio de comunicados. O el hecho de que a veces, cuando uno va a consultar una nota de prensa ésta no aparezca en la web municipal.
En nada se parece este modo de actuar a la maquinaria de elaborar comunicados y respuestas para la oposición en que se convirtió el anterior gabinete de prensa del PP, controlado por la edil María Josefa ‘Chela’ Figueira.
Ahora las tornas parecen haber cambiado en lo que respecta al PP, con una política de comunicación muy errática, a la que parece haberle pasado factura no controlar el Ayuntamiento de Marbella. En la mayoría de los casos no mandan fotos de sus ruedas de prensa, a pesar de los 10.000 euros que reciben como asignación por grupo municipal.