Un hombre de nacionalidad holandesa y 30 años ha sido detenido en Oslo (Noruega) gracias a la cooperación policial internacional como presunto autor de los disparos con subfusil ocurridos en un club nocturno de Marbella el 10 de septiembre del pasado año.
El arrestado tenía en vigor una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) tramitada por el Juzgado de Instrucción número 2 de Marbella por esos hechos, según han informado desde la Comisaría provincial.
En el momento de la detención, el fugitivo se hizo pasar por otra persona presentando un pasaporte holandés falso y, además, se había quemado las yemas de los dedos con el objetivo de dificultar su identificación en el caso de ser localizado.
La investigación se inició el día 10 de septiembre. Durante la madrugada se produjo un enfrentamiento entre varios clientes en el interior de un club de alterne, que acabó con cinco heridos, cuatro de ellos por arma de fuego.
Los agentes ya habían arrestado a otros siete participantes en los hechos por delitos de tenencia ilícita de armas, homicidio en grado de tentativa y lesiones.
Según las primeras investigaciones, los agentes constataron que la pelea se inició cuando un grupo de cuatro personas golpearon a otro individuo. El agredido abandonó el local para regresar una hora después y, encapuchado, disparar a ráfaga con un subfusil contra sus agresores.
Uno de estos repelió la agresión disparando con una pistola que portaba –hallada durante la inspección policial oculta bajo una loseta–, iniciándose un tiroteo que acabó con cinco heridos, cuatro de ellos por arma de fuego, según han indicado desde la Policía Nacional en un comunicado recogido por Europa Press.
Tras ello, el primer tirador huyó del lugar a bordo de un vehículo, mientras que seis de los participantes eran detenidos en el lugar una vez comprobado su grado de participación en los hechos.
Uno de los arrestados, nacido en Marsella hace 30 años, era un fugitivo reclamado por las autoridades francesas por homicidio voluntario y tráfico ilícito de armas, municiones y explosivos.
Los investigadores centraron las pesquisas en torno al individuo huido y localizaron el turismo utilizado en su fuga al día siguiente. El vehículo estaba totalmente calcinado y comprobaron que se trababa de un vehículo que había sido alquilado fraudulentamente en una empresa de rent a car. Desde ese momento la investigación se dirigió a identificar y localizar al fugitivo.
Tres registros: detenido el séptimo participante
Días después de los hechos se llevaron a cabo tres registros en los domicilios de los detenidos en los que se intervinieron, entre otros efectos, seis vehículos de gama alta, una pistola, una carabina de aire comprimido, pistola de fogueo de nueve milímetros, una pistola de perdigones y munición.
También se intervinieron 12.660 euros en efectivo, un machete, una bocacha metálica de arma larga, un dron habilitado para realizar grabaciones, tres placas de matrícula alemanas y una española, 21 teléfonos móviles de distintas marcas y modelos además de material informático.
En una de las viviendas, los agentes localizaron y detuvieron a otro de los participantes en la reyerta, un hombre –hermano del segundo tirador– de nacionalidad belga y 28 años, que resultó ser la persona que, auxiliado por una trabajadora del club –también detenida en la operación–, escondió la pistola bajo la loseta.
Tras varias gestiones, y gracias a los mecanismos de cooperación internacional, los investigadores localizaron al fugado en Oslo. El pasado día 21 de diciembre era arrestado en virtud de la orden europea tramitada por el Juzgado de Instrucción número 2 de Marbella.
Al arrestado se le imputan cuatro delitos de homicidio en grado de tentativa, cuatro delitos de lesiones y un delito de tenencia ilícita de armas y se encuentra pendiente de ejecutar su extradición a España.