Antonio Calleja, exgerente de Gerencia de Compras y Contratación Marbella S.L., ha declarado este viernes en el juicio por el llamado ‘caso Fergocon’ que él era un “simple contable” y recibía órdenes del entonces alcalde, Julián Muñoz, para contabilizar las facturas de la empresa Fergocon, propiedad de dos de los hermanos del exasesor jurídico municipal José María del Nido.
Calleja, que gozó de gran poder e influencia durante los gobiernos de Jesús Gil, Julián Muñoz y Marisol Yagüe, ha indicado que recibía órdenes de los administradores de la sociedad Fergocon y también de los alcaldes, que según el momento eran Jesús Gil o Julián Muñoz.
“Pasmado” con las declaraciones de Muñoz y Del Nido autoinculpándose
El acusado ha dicho que se quedó “pasmado” cuando Del Nido y el exalcalde marbellí Julián Muñoz, en sus declaraciones, “reconocieron que había sobrecostes y facturas falsas, y ha asegurado que “nunca” ha participado en ninguna trama de corrupción. Asimismo, ha declarado que a raíz de su actividad no ha recibido beneficio alguno por parte de la empresa vinculada a los hermanos del expresidente del Sevilla, ni de nadie.
Aunque ha asegurado que “no era ningún títere”, ha insistido en que él se limitaba a contabilizar las facturas, “no pagaba”, y en que entendía que cuando llegaban estas certificaciones “ya estaban reconocidas y el trabajo hecho”, siendo “lo importante” que vinieran firmadas.
Calleja se enfrenta a 10 años de prisión por diversos delitos
Este procesado, que se enfrenta a una petición de 10 años de prisión reclamada por el fiscal, por los delitos de fraude en la contratación y malversación y falsedad, se ha desvinculado de las decisiones que se tomaban en el Ayuntamiento sobre la contratación de obras a la empresa relacionada con los hermanos del letrado José María del Nido y ha negado haber participado en una trama corrupta, mostrando sorpresa ante la confesión realizada por el expresidente del Sevilla.
La Sección Octava de la Audiencia de Málaga ha continuado este viernes el juicio a Del Nido, al exalcalde marbellí Julián Muñoz y otras 10 personas por las presuntas irregularidades en contrataciones de obras a la empresa Fergocon por parte del Ayuntamiento de Marbella en 2001 y 2002. La vista oral continuará el próximo lunes con la continuación de la declaración de Calleja, que en esta sesión ha contestado las preguntas de la Fiscalía Anticorrupción y del Consistorio.
Según el fiscal, las adjudicaciones, “que se hacían prescindiendo de los procedimientos legales”, tuvieron el consentimiento” de este acusado. Además, la acusación pública sostiene que el exgerente gilista conocía las circunstancias en las que fue contratada Fergocon y la falta de ejecución de trabajos por parte de esa empresa.
Calleja se ha desvinculado completamente de la toma de decisiones en cuanto a contratación, adjudicación o control de los trabajos; ya que, ha explicado, él era un contable; aunque la acusación sostiene que “conocía la ausencia de controles” y “nunca exigió presupuesto ni contrato antes de pagar” las certificaciones de obras. Ha apuntado que ahora le puede llamar la atención ese sistema, pero ha reiterado: “yo no tenía ninguna potestad”.
Quejas del acusado sobre la aportación de documentos desde el Ayuntamiento al tribunal
Asimismo, ha asegurado que el Ayuntamiento “no ha aportado toda la documentación” necesaria para esta causa, algo que también ha manifestado el anterior acusado en declarar, el excoordinador de Obras Vicente Manciles.
Al respecto, el abogado que representa al Consistorio, personado como acusación particular, ha señalado que no hay ocultación y que cuando el Tribunal de Cuentas acudió a requerir los documentos “estos señores estaban en sus puestos”.