Díaz y Porcuna presentan el borrador del Plan de Playas 2016 en el Ayuntamiento.
El Ayuntamiento ha enviado a la Junta de Andalucía el primer documento de propuestas técnicas para ordenar y regular los usos de las playas del litoral de Marbella y San Pedro para la temporada de 2016. Un borrador que hace referencia no solo a los usos y actividades autorizadas en el entorno sino también a las instalaciones y los equipamientos.
El anuncio lo ha hecho este martes el delegado de Sostenibilidad, Miguel Díaz (IU), acompañado por el portavoz municipal, Javier Porcuna (PSOE). Ambos han señalado que el plan, que está a la espera de aprobación por la Junta, garantizará tres criterios: el uso público de las playas, la protección ambiental y la generación de empleo.
Díaz ha asegurado que habrá un salto de calidad en la protección de espacios naturales del municipio, especialmente las dunas. Y todo ello sin perjudicar a la industria turística y mejorando los servicios y equipamientos para los ciudadanos.
Protección de dunas
“Por primera vez haremos trabajos previos de protección en la reserva dunar, empezando por prohibir el aparcamiento de vehículos sobre ellas. Y vamos a recuperar la zona de la duna del Pinillo, que hasta ahora ha quedado fuera de protección. Son 73.000 metros cuadrados con muy mala conservación y que ahora vamos a proteger”, ha explicado.
“Primero hay que frenar las actividades que causaban daños, prohibiendo a los vehículos aparcar sobre ellas y erradicando especies invasivas. Y una vez que estas zonas tengan un cordón defensivo, instalar más paneles informativos para darles un valor turístico”.
Eso no significa que no se pueda aparcar, pero sí lo estará encima de las dunas. La memoria técnica del proyecto habla de facilitar el aparcamiento regulado. “Se ofrecerán alternativas de aparcamiento lo más cerca posible. No pasa nada por andar tres o cuatro minutos para ir del coche a la playa, es bueno y saludable”, ha continuado Díaz.
“La calidad turística se construye con buenos servicios, equipamiento y respeto al Medio Ambiente”, ha añadido.
Diques sumergidos en lugar de espigones
Para evitar el desbordamiento de las playas que tanto daño hacen en la arena, la propuesta técnica deja de lado los espigones y apuesta por los diques sumergidos en paralelo a la línea de costa.
Al tratarse de competencias que exceden de las municipales, se han establecido negociaciones con la Demarcación de Costas de la Junta de Andalucía para hacerlo de cara a 2017, según ha informado el propio Díaz, quien asegura que son San Pedro y los alrededores de La Bajadilla las zonas más castigadas y que con más urgencia necesitan una solución.
Carácter social de las playas
El nuevo plan entiende las playas como “un espacio para el disfrute de cualquier persona con unos servicios básicos. Habrá instalaciones suficientes y se pondrán nuevas a concurso público para crear empleo”.
Entre las mejoras que se plantean para dar un carácter social a las playas están las de adaptar zonas de baño para personas con movilidad reducida, habilitar zonas de moragas con iluminación y aseo, crear áreas recreativas y para practicar deportes acuáticos y náuticos, fomentar el cine en la playa o crear ‘calles’ en el agua para la práctica de la natación mediante la instalación de boyas.
Impacto en la industria turística
En cuanto a la industria turística que vive de las playas, el equipo de gobierno insiste en que la única obligación es que se cumplan las concesiones en cuanto a la utilización del espacio, limitándose a lo regulado. “No habrá menos concesiones y menos empleo, sino más”, ha asegurado Díaz.
“Hay que conciliar muchos intereses pero preservando siempre uno: el interés ciudadano”, ha apuntado Díaz, quien ha cifrado en unos 650.000 euros el canon correspondiente a chiringuitos desmontables, mesas, sillas, hamacas, espeteros, zonas de juegos, actividades náuticas, servicios de masaje y moragas.
Regulación de los chiringuitos
Por último, sobre el estado de la regulación de los chiringuitos, Porcuna ha afirmado que la variedad de ellos hace que cada uno se encuentre en una situación distinta.
“Los hay fijos, algunos concedidos y otros en solicitud transitoria. Hay 65 chiringuitos en Marbella y unos dependen del Ayuntamiento y otros de la Junta. Pero estamos manteniendo el servicio y la calidad, llegando a acuerdos con ellos para solucionar a través del nuevo reglamento situaciones que llevan décadas produciéndose”, ha detallado.
