El Partido Popular de Marbella ha decidido reaccionar y salir al paso de la campaña a pie de calle puesta en marcha por el PSOE local, ‘Tomamos nota. Este jueves la portavoz de los populares, Carmen Díaz, como si de una contraprogramación se tratara, ha anunciado que la formación conservadora quiere “sumarse” a dicha campaña. La edil de Cultura, ha hecho gala de su habitual tono ácido y crispado para arremeter contra el portavoz socialista, José Bernal, y la Junta de Andalucía, blanco de sus ataques por “la falta de inversiones” en la ciudad.
Al hilo de lo dicho por Díaz, otras fuentes populares consultadas por este medio de comunicación no descartan comenzar a salir a la calle para recabar propuestas y quejas. Se trataría de un capítulo más en la estrategia de confrontación con el Ejecutivo autonómico. En el seno del partido de centroderecha creen que esa estrategia cala. No obstante, se trata de un discurso, el del victimismo, que Ángeles Muñoz lleva utilizando desde su llegada a la Alcaldía en 2007.
Díaz, que ha tomado el protagonismo mediático durante esta semana, ante la ausencia de la alcaldesa de la ciudad, insta al PSOE a que en su nueva campaña “empiece tomando nota de las deficiencias y del déficit de equipamientos e infraestructuras de la Junta en Marbella”.
La delegada de Cultura aprovechó para recordar los 33 años de gobiernos del PSOE en Andalucía y culpar a dicho partido “del gran número de ‘debes’ que tiene la Junta con Marbella”. Centra sus críticas en distintas carencias en materia de educación, sanidad y equipamientos judiciales, entre otros. De nuevo la reivindicación histórica sobre el colegio Gil Muñiz es esgrimidas por el PP.
Precisamente en materia educativa la portavoz popular– profesora de Instituto en excedencia- ya protagonizó una gran polémica en Twitter. Fue a comienzos de 2013, cuando denostó con graves descalificaciones la educación pública, al decir que creaba “ciudadanos subsidiarios, débiles y dependientes”.
En el ámbito sanitario, Díaz sugiere al PSOE de Marbella que tome nota de “deficiencias” como la terminación de las obras de ampliación del Hospital Costa del Sol, los demandados segundos centros de salud de San Pedro Alcántara, Las Chapas y Nueva Andalucía o las mejoras en las instalaciones de Leganitos y Las Albarizas.
Falta de protagonismo de Manuel Cardeña como secretario general del PP
Llama poderosamente la atención la falta de protagonismo del secretario general del PP de Marbella, Manuel Cardeña, a pesar de ser el número dos del partido tras la presidenta, Ángeles Muñoz. No se le conocen comparecencias públicas ante los medios de comunicación- en calidad del cargo orgánico que representa- desde que años atrás Muñoz creara expresamente para Carmen Díaz el cargo de portavoz. Es ella la que traslada cada semana los mensajes del partido.
No obstante, cada vez gana más peso dentro de la formación conservadora la figura de Kika Caracuel, vicepresidenta primera de la Diputación que se multiplica a diario en charlas y encuentros con militantes en las sedes locales. Ella es vista con muy buenos ojos por Elías Bendodo para un hipotético relevo en la Alcaldía, ante cualquier contingencia de Muñoz. Sería sin duda la mejor situada para sustituir a la actual primera edil marbellí.
Carmen Díaz aprovechó el jueves la toma de posesión del nuevo fiscal jefe de Marbella, Julio Martínez Carazo, para reclamar a la Junta la construcción de una Ciudad de la Justicia en Marbella. Lo hizo después de que el representante del ministerio público pidiera unas “instalaciones dignas”.
Tampoco faltaron las críticas al crédito de 100 millones de euros que la Junta de Andalucía, presidida en 2006 por Manuel Chaves, otorgó al Ayuntamiento de Marbella tras la disolución del Consistorio, tras la llamada ‘operación Malaya’, contra la corrupción municipal imperante entonces.
Después de recordar que la cantidad de 100 millones fue fijada “en concepto de lo que se había dejado de invertir”, la edil del PP insistió en los argumentos de la alcaldesa: “Se está devolviendo ese dinero pero lo que no va a aceptar la ciudad de Marbella es pagar dos veces por lo que no tenemos”,
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