Los tiempos estaban perfectamente calculados y medidos. El presidente del PP-A, Juan Manuel Moreno Bonilla, ha elegido precisamente Marbella, una ciudad de más de 100.000 habitantes, para presentar el próximo sábado 13 de septiembre a los candidatos de municipios de más de 25.000 habitantes. Lo hará para designar expresamente con su apoyo la candidatura de Ángeles Muñoz . Será tres días después de que la regidora declare como imputada por cuatro presuntos delitos en el Juzgado de Instrucción 4 de la ciudad.
El primer paso de esta meditada estrategia de Muñoz y sus asesores fue convocar el pasado fin de semana un comité ejecutivo local, a celebrar este martes, cuya convocatoria para proponer a la regidora por cuarta vez como candidata fue desvelada este lunes por marbellaconfidencial.
El pasado domingo, en el marco del plan trazado por Muñoz para legitimarse como alcaldable en 2015, el PP de Marbella facilitaba a un diario provincial una encuesta, encargada por el propio partido al Gabinete de Estudios Sociales y Políticos de Andalucía. El sondeo publicado el lunes es prácticamente una foto fija del actual estado de la Corporación local: el PP obtendría la mayoría absoluta con 15 ediles (lo que tiene actualmente); el PSOE 6-7 (tiene 7); OSP 3 (los mismos) e IU podría subir de los 2 actuales a 3.
La encuesta fue elaborada del 23 de junio al 2 de julio y, sorprendentemente, engloba bajo el 8,9% a la opción “Otros”. No parece reflejar fielmente la realidad, porque en todos los sondeos internos que manejan los partidos UPyD superaría el corte del 5% en Marbella y lograría irrumpir en el salón de plenos. Tampoco se dan posibilidades de lograr edil alguno a Podemos, que obtuvo 2.000 votos a nivel local en los comicios europeos del 25 de mayo.
De nada ha servido la postura de la dirección provincial que lidera Elías Bendodo, partidario de retrasar el proceso de designación de Muñoz hasta ver qué deparaba la comparecencia judicial de la alcaldesa. Las fuentes populares consultadas aseguran que el enlace del presidente del PP de Málaga en las conversaciones con la alcaldesa marbellí ha sido la secretaria general provincial, Margarita del Cid, su mano derecha y persona de absoluta confianza en todos los asuntos orgánicos.
Reuniones y conversaciones entre Bendodo, Del Cid y Muñoz sobre su candidatura
Las reuniones y conversaciones entre Bendodo, Del Cid y Muñoz se han sucedido a lo largo del verano para tantear sus posibilidades. Los que la conocen bien aseguran que la munícipe marbellí no se cansa de repetir que su obsesión es alcanzar el 40% de voto que le permitiría tener la mayoría absoluta si, como es previsible, el Partido Popular saca adelante la polémica reforma electoral.
Otro respaldo a sus planes lo obtuvo el pasado 19 de agosto, cuando Arenas, Moreno Bonilla y el presidente de la FEMP y alcalde de Santander, Iñigo de la Serna, convocaron a los medios a la puerta del Ayuntamiento de Marbella para hacer lo que se conoce como ‘un canutazo’ (hacer declaraciones de pie a los periodistas) en plena tormenta por la reforma electoral para la elección de alcalde directo, abanderada por el propio Arenas desde su residencia de verano en la localidad costasoleña.
Primeras alarmas del desgaste de Muñoz tras las europeas
Las primeras alarmas del desgaste y la erosión de Muñoz como alcaldesa, envuelta en diversos escándalos sobre su patrimonio e inversiones en Luxemburgo, comenzaron a encenderse tras perder el PP las elecciones europeas del 25 de mayo en Marbella frente al PSOE por 101 votos. Ni los más pesimistas dentro de la formación de centro-derecha lo contemplaban ni por asomo.
Finalmente, la buena relación personal entre Ángeles Muñoz y Juan Manuel Moreno, trazada especialmente cuando ambos compartieron escaño en el Congreso de los Diputados, se ha impuesto a las pautas que se pretendían marcar desde la sede popular de la avenida de Andalucía en Málaga.
A lo anterior cabe añadir el peso que aún tiene Javier Arenas en el seno del PP andaluz y el hecho de que Muñoz haya sido siempre una persona de su absoluta confianza. Su meteórica carrera política fue fruto de la apuesta personal del cuatro veces candidato a presidir la Junta de Andalucía y ministro vicepresidente segundo con Aznar.
Muñoz pasó de ser concejala del pequeño municipio malagueño de Benahavís en 1995 a convertirse en parlamentaria andaluza primero y luego miembro del primer Gobierno de Aznar en 1996, como directora general de Migraciones. Arenas la fichó nada más ocupar la cartera de flamante ministro de Empleo. La también presidenta de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) preside el PP de Marbella desde 1998, cuando Arenas impuso una Gestora.