Las obras municipales siguen generando polémica en la campaña electoral. Después de que se conociera que muchas de ellas, anunciadas como de “empresas locales”, no eran del municipio, el candidato del PSOE a la alcaldía, José Bernal, anuncia que una de sus primeras medidas –en caso de alcanzar la alcaldía– será la elaboración de una auditoría sobre las adjudicaciones otorgadas durante la gestión del PP (2007-2015).
El líder socialista sospecha, además, que en “muchas” de las obras “podría haber sobreprecio incluido dentro de esas concesiones”. Considera también que “muchos” trabajos han terminado con “irregularidades e imperfecciones” que, asegura, después han tenido que corregir los trabajadores municipales, “elevando el coste en un 10%”.
Bernal cree especialmente grave este aspecto por su repercusión “doble en las arcas municipales”, primero con la externalización y después con un sobrecoste. Como ejemplo de trabajos “mal acabados” cita el plan de asfaltado, que “ha destrozado bordillos en muchas calles y ha ocultado elementos del saneamiento como alcantarillas y cajas de registro”, denuncia el edil opositor.
“Entendemos que Ángeles Muñoz no ha velado por los intereses generales de este municipio, ya que a estos ejemplos se unen muchos más que no han contado con una buena gestión por parte de este equipo de gobierno”, argumenta el alcaldable socialista. Además, habla de “innumerables retrasos, modificaciones de proyectos y externalizaciones que no se justifican bajo ningún concepto y que han de ser revisadas”.
El también secretario local del PSOE didd no entender qué ha sucedido con muchos proyectos. Cita como ejemplo la piscina de Miraflores y el hecho de que, una vez concluida, la alcaldesa, “arbitrariamente”, decidiera iniciar las obras nuevo.