Manuel López, un auténtico emblema de lo que ha significado siempre la causa por la independencia de San Pedro Alcántara, frente a Marbella, falleció este sábado a los 75 años de edad, debido a una enfermedad que había provocado su desaparición total de la escena pública en los últimos meses.
Se le pudo ver en varias concentraciones vecinales que se organizaron contra la polémica gestión del teniente de alcalde de San Pedro, Rafael Piña, de OSP, actual socio de gobierno del PP.
La ausencia de este sampedreño deja un gran vacío en la sociedad civil, a la que estaba muy vinculado, infatigable al desaliento –a pesar de los reveses judiciales que rechazaron la segregación– desde la Asociación Pro Independencia de San Pedro.
Su andadura política comenzó en el PSOE, partido al que se afilió y fue concejal en la primera Corporación municipal democrática (1979-1983). En las siguientes elecciones concurrió de nuevo por las siglas del puño y la rosa. Fue el primer teniente de alcalde de San Pedro, entre 1983 y 1985, pero sus desencuentros con el entonces alcalde, José Luis Rodríguez, le llevaron a darse de baja y fundar Independentistas por San Pedro (ISP).
En 1987 fue cabeza de lista por ISP, partido que de la nada obtuvo cinco concejales y 4.000 votos. Ya en los siguientes comicios locales, con el terremoto que supuso el desembarco de Jesús Gil con su partido GIL y 19 ediles, ISP logró resistir con dos concejales, uno de ellos López.
De trato muy afable y fuerte carácter, su desaparición no ha dejado a nadie indiferente y la noticia de su fallecimiento corrió como la pólvora por todo el término municipal ,a última hora del sábado.
Su funeral ha tenido lugar en San Pedro este domingo a las cuatro de la tarde y hasta allí se han acercado todos los que han querido darle su ultimó adiós a este gran luchador, no sólo por el segregacionismo, sino también frente a los modos dictatoriales que representó la oscura etapa de Jesús Gil. Descansa en paz Manolo.