La Fiscalía de Medio Ambiente ha presentado una denuncia contra las dos sociedades responsables del festival musical Starlite, que se celebra cada verano en Marbella, así como contra el administrador de las mismas, Ignacio Maluquer, marido de la empresaria y promotora del evento desde 2012, Sandra García Sanjuan. Se investigan presuntos delitos contra la ordenación del territorio y desobediencia a la autoridad, a raíz de una serie de obras irregulares que se acometieron desde 2012, cuando comenzaron las actividades, en el recinto natural de la cantera de Nagüeles.
Fuentes jurídicas han confirmado a Marbella Confidencial que la denuncia del fiscal Fernando Benítez parte de los informes que ha elaborado el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil que fueron desvelados por este medio digital en septiembre de 2016. Las sociedades denunciadas son Bendeus S.L. y Avory Celebrity Acces S.L., ambas administradas por Maluquer.
Desde el Ministerio Público se insta a que el juzgado de Marbella que corresponda, en reparto, abra diligencias previas para averiguar si los hechos podrían ser constitutivos de un delito contra la ordenación del territorio y otro de desobediencia grave a la autoridad.
El Ayuntamiento de Marbella y una de las dos empresas citadas, al parecer Bendeus S.L., ratificaron en julio de 2012 un convenio de colaboración autorizando a la sociedad la ocupación del auditorium de Marbella, situado en dicha cantera, para el desarrollo del evento conocido como Starlite.
En mayo de 2014, hubo otro acuerdo con la otra empresa controlada por Maluquer para la misma actividad. Los dos convenios suscritos bajo mandato de la entonces alcaldesa Ángeles Muñoz, del Partido Popular, contemplaban que se autorizaba llevar a cabo instalaciones eventuales, dadas las características del suelo donde está el auditorio.
Según las fuentes judiciales que cita Europa Press, de lo investigado hasta ahora se desprendería que las entidades, sin la licencia municipal correspondiente, habrían llevado a cabo tras los acuerdos obras de construcción “de carácter permanente”, como muros y pavimentación con hormigón. Esto, han apuntado, sabiendo que el suelo es no urbanizable de especial protección, siendo las obras no autorizables.
Así, se insta a que se pida al Ayuntamiento los expedientes que pueda haber en cuanto a las obras y que remita un informe técnico, tras una inspección, sobre las actuaciones denunciadas, que han sido investigadas por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, cuyos agentes serán citados a declarar como testigos.
El pasado 6 de junio este medio digital publicaba informes de la Policía Local de Marbella en los que se recogían autorizaciones “verbales” del concejal de Industria, Javier Porcuna, a Starlite para prolongar horarios como discoteca. La publicación de los documentos se produjo una semana después de que el brazo derecho del alcalde asegura que él “nunca” había dado permiso verbal alguno. De hecho, volvió a negarlo tras desvelarse los informes policiales, pero no desmintió la versión del responsable de dirección del festival, Jorge Rodríguez Ménendez, que apuntó tal extremo.
Ver aquí vídeo con las declaraciones de Porcuna sobre los “permisos verbales”.
Tras visionar el último testimonio del teniente de alcalde el sindicato policial SIP-AN solicitó la pasada semana, por escrito, a Porcuna que explicara cuál había sido el curso de las diversas actas de denuncia abiertas por la Policía Local contra Starlite durante el verano de 2016. Se trataba de hehos “graves o muy graves” que, a juicio de los sindicalistas, debieron ser objeto de multas.
Los antedecentes de la denuncia de Fiscalía que fueron dados a conocer por Marbella Confidencial en septiembre de 2016
El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) requirió al Ayuntamiento de Marbella numerosa documentación relacionada con las actividades que desarrolla el festival Starlite, que se celebra cada verano entre el 15 de julio y el 20 de agosto. Esta actuación se produce tras varias denuncias ante la Policía Local y la propia Benemérita interpuestas por el abogado Marco Arafat –uno de los fundadores de Podemos en Marbella– que representa a una serie de particulares afectados por el evento musical.
La queja principal que ,motivó la actuación del Seprona fue hecho de que la entidad Bendeus S.L., mercantil que explota el recinto, decidiera prolongar el horario de apertura. Concretamente, las instalaciones han cerrado habitualmente pasadas las 6:30 de la mañana, en el marco de actividades de discoteca, cuyo permiso oficial ponen en duda los denunciantes. El horario de apertura establecido inicialmente entre semana era hasta las 2:00 y fines de semana hasta las 3:00.
Según el escrito del Seprona al que tuvo acceso Marbella Confidencial, dirigido a varias delegaciones municipales, así como a la Policía Local, el pasado 7 de septiembre, se pretendía comprobar la “situación legal” de las instalaciones, actividades y “obras realizadas” en la zona de la Cantera de Nagüeles, entre otras seis peticiones diversas de información incluidas en el escrito.
Las delegaciones de Alcaldía, Industria, Sostenibilidad, Urbanismo, Policía Local, así como Obras e Infraestructuras han recibido por igual esta petición del Seprona.
Las desavenencias entre Porcuna y el entonces jefe de Policía Local a cuenta de Starlite
Se da la circunstancia de que uno de los mayores desencuentros entre el ya exjefe de la Policía Local, José Andrés Montoya, y el delegado de Seguridad Ciudadana e Industria, entre otras áreas, Javier Porcuna, se debió a la prolongación del horario de Starlite autorizado por el propio Porcuna hasta las 6:30 de la madrugada, frente a lo inicialmente establecido, que no abarcaba más allá de las 3:00, tal y como adelantó este medio digital.
De hecho, el propio Montoya llegó a personarse en distintas ocasiones en Starlite, junto a varios efectivos, a raíz de las denuncias presentadas en Policía Local y levantó actas. Los responsables del festival les aseguraron a los agentes tener autorización “verbal” del propio Porcuna para cerrar a las 6:30.
En su escrito dirigido al entonces jefe de Policía Local el 2 de septiembre de 2016 el letrado Marco Arafat le rogaba que actuara, “en calidad de autoridad”, para velar por la legalidad de las actividades de Starlite.
Asimismo, le solicitaba que “contacte urgentemente con la Guardia Civil y Seprona” y “ayude a esclarecer”, a tiempo, quién “esta siendo el responsable dentro del Ayuntamiento de estas anomalías y cuáles son las razones por las que usted [Montoya] no ha podido, ni puede hacer cumplir con el horario otorgado en licencia de apertura este verano, a pesar de estar expresamente denunciados tales hechos desde el día 5 de agosto de 2016 y estando apoyada la denuncia por una relación de firmas de 14 vecinos residentes en Nagüeles”, reza el escrito que obra en poder de este medio digital.
Quejas de empresarios de la noche contra Starlite por competencia desleal
El consentimiento del Ayuntamiento para que Starlite prolongara su apertura más allá de las 3 de la madrugada, al obtener permiso como discoteca, ha motivado el malestar de numerosos empresarios de la noche, concretamente de Puerto Banús, especialmente de Juan Carlos Ferrero, al frente de los locales FunKy Buddha, que ha liderado las quejas trasladadas a Montoya para que éste actuara.
El pasado 9 de septiembre el alcalde, en declaraciones a este medio, aseguraba que no le constaban las actas levantadas por la Policía Local a Starlite, por prolongar su horario hasta las 6:30 “porque es un asunto que lleva la delegación de Industria”, dijo en alusión a Porcuna.
La Guardia Civil quiere saber en qué condiciones explota Bendeus S.L. el Starlite y si esta sociedad limitada, controlada por Sandra García Sanjuan y su marido, Ignacio Maluquer, “posee consentimiento de la Administración para realizar las actividades realizadas”, por lo que los agentes requieren la documentación que así lo exprese.
Los tipos de licencias municipales otorgadas
Se solicitan los tipos de licencias municipales otorgadas a Bendeus para la ejecución de “las diferentes obras permanentes y desmontables, para el cierre del lugar y para la modificación del terreno”. Asimismo, se piden los permisos concedidos en la parte donde se ubica el auditorio, además del parking frente al parque de Nagüeles.
No menos relevante resulta el hecho de que el Seprona quiera conocer si Starlite posee seguro de responsabilidad civil y “si éste cubre las actividades realizadas (auditorio de música en directo, discoteca y restaurantes).
Los investigadores del Instituto Armado quieren conocer si el evento cuenta con aprobación del plan de evacuación de emergencias y plan de autoprotección en materia de incendios forestales para las actividades realizadas. De hecho, requiere copia de los informes elaborados por “técnicos competentes”.
También se solicitan las “medidas de protección de la legalidad urbanística y/o sancionadora/s que en su caso se hayan adoptado en el recinto”, entre otras peticiones como la referida a la instalación del sistema de iluminación “apoyado en las ramas y troncos de los árboles existentes en el camino de acceso al Auditorio”. Todo ello después de que durante una inspección se comunicara al Seprona que los cables fueron instalados por el Ayuntamiento.