Mucho se habló en círculos políticos, durante la pasada campaña electoral de las municipales –siempre en privado– sobre la posibilidad de que la concejala de Ciudadanos, María García, acabara ‘enchufada’ como cargo de confianza del Partido Popular si Ángeles Muñoz repetía como alcaldesa. Este viernes se ha consumado la contratación, con 52.000 euros de sueldo anual, de quien fuera tan fiel escudera de las políticas del equipo de gobierno del PP (mayoría absoluta en solitario), pero sobre todo de la propia regidora, a quien apoyó sin fisuras.
García Ruiz lanzó incluso duras críticas hacia sus propios compañeros de la oposición (PSOE y OSP), cuando se desataron todos los escándalos político-judiciales que tuvieron contra las cuerdas, meses atrás, a la también senadora conservadora por Málaga.
Los datos de María García Ruiz como “asesor coordinador”, en el capítulo de “Personal eventual” del Ayuntamiento de Marbella, pueden verse ya como tales en la web municipal. El PP completa así el número de cargos de confianza, al sumar también la contratación de Manuel Haro, patrón de la Cofradía de Pescadores.
Como ya informó Marbella Confidencial la entonces edil de Cs, María García, se había convertido en una concejala más del Partido Popular en todos los plenos, así como en las declaraciones que hacía a los medios de comunicación.
La que fuera candidata a la Alcaldía por la formación liberal en 2019 siempre mostró su respaldo absoluto a la alcaldesa cuando su gestión comenzó a ser cuestionada por la oposición, a raíz de los sucesivos escándalos político-judiciales en los que se vio envuelta Muñoz. Todos ellos derivados de la causa penal abierta en la Audiencia Nacional contra su marido (ya fallecido) y su hijastro, Joakim Broberg. Ambos fueron procesados en el marco de una organización criminal, dedicada presuntamente al blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico. El juicio está pendiente de celebrarse.
El argumentario de García, cada vez que se le preguntaba, o bien en los plenos, era responder que se trataba de “asuntos personales” de la alcaldesa en los que no iba a entrar. El comportamiento de la munícipe opositora chocaba de forma sistemática con la línea beligerante que mantenía su propio partido, Ciudadanos, que llegó a expulsarla antes de las elecciones locales del pasado mes de mayo.
Mientras el candidato de Cs, Ángel Mora, exdirector general en la Consejería de Políticas Sociales en el primer gobierno de Juanma Moreno, criticaba con dureza la falta de transparencia de la alcaldesa, e incluso se mostraba partidario de que no siguiera en política, “para no ensuciar más el nombre de Marbella a nivel nacional”, María García cerraba filas con la polémica regidora del PP.
Desde Cs reconocieron incluso –está publicado– que fue precisamente hace un año, justo por estas fechas, cuando García dejó de tener contacto con la dirección provincial de su partido y con el propio Mora, quien la acusó de “tener secuestrado el partido en Marbella”.
Justo en quellas fechas, entre octubre y noviembre de 2022, comenzaron las primeras informaciones, basadas en informes policiales de la UDEF, acerca de las actividades que llevaba a cabo el hijastro de la alcaldesa a través de un testaferro, Nils Fisher, también procesado en la Audiencia Nacional, que obtuvo casi un millón de euros en contratos de obras municipales.
Tras su expulsión del partido, ya como desahuciada política, García acabó pidiendo el voto para Ángeles Muñoz y se dedicó a intentar erosionar la campaña del candidato de Cs. Ella no fue en la lista electoral del PP, pero ahora ha conseguido entrar como cargo de confianza en el consistorio marbellí.
Antiguos compañeros de la exedil de Cs en el partido, consultados por este medio digital, dudan acerca de que García vaya a entrar a coordinar el área de Protocolo, como algunos mantenían antes de las elecciones, dada su “falta de mano izquierda” a la hora de tratar especialmente con los periodistas, algo que quedó demostrado antes de ser concejala. Trabajaba entonces para una emisora de radio local, organizando eventos.Un vídeo suyo gritando a los informadores se hizo viral: “¡No quiero prensa en la sala! , decía a voz en grito poco antes de que la duquesa de Alba entrase al salón de plenos del Ayuntamiento de Marbella.
VÍDEO.- Así acostumbraba a tratar a la prensa la ahora candidata de @CiudadanosCs en #Marbella #26M, María García, cuando era subdirectora de @CopeMarbella pic.twitter.com/bwHkwYdhRT
— José Carlos Villanueva (@JC_Villanueva) May 9, 2019
La primera incursión de María García al desembarcar en la política marbellí no pudo ser más errática cuando fue nombrada candidata a la Alcaldía. La alcaldable se empadronó en un piso que ocupaba una familia de inmigrantes brasileños, tal y como desveló Marbella Confidencial tras una investigación periodística publicada en mayo de 2019.