La inesperada declaración testifical de la mujer de Carlos Fernández, Carla Copari, periodista de profesión, ante el juez federal que tiene que decidir sobre su extradición ha retrasado la resolución del magistrado hasta este próximo viernes.
El titular del Juzgado Federal 2 de San Juan, Guillermo Rago Gallo, aceptó la prueba solicitada por las defensas y pospuso los alegato de los abogados de Fernández y el fiscal federal, Francisco Maldonado, para la mañana de este jueves.
Según fuentes que participaron de la audiencia, Coppari declaró durante 15 minutos y no pudo contener la emoción al explicar cómo fue que conoció a Fernández, cómo fue que se casaron legalmente y cómo fue que anotó legalmente a sus dos hijos en el Registro Civil.
Esos momentos de lágrimas de la exmodelo y periodista fueron en la cara de Carlos Fernández. También estaban presentes el fiscal federal Maldonado, los abogados defensores, la secretaria penal y el juez Rago Gallo.
Coppari también contó que en el barrio Municipal y en la escuelas de sus hijos todos conocen a Carlos por Fernández y no por Hernández, como se hacía llamar públicamente ante sus clientes de la empresa de coaching Europa Coaching, negocio que Fernández inventó una vez instalado en San Juan, ya que en España nunca se había ganado la vida asesorando a políticos, empresarios y medios de comunicación.
Según las fuentes, en todo momento Coppari dijo que Carlos se hacía llamar por Fernández.
Legalmente ella no está obligada a explicar por qué usó el apellido Hernández públicamente, debido a que como esposa es familiar directo y no tiene responsabilidad en declarar algo que pueda perjudicar a su marido.
De esa forma, la defensa le llevó al juez federal herramientas para intentar demostrar que Carlos Fernández tiene arraigo en San Juan.
En completo silencio, esposado, y apenas minutos antes de las 9 horas de este miércoles, el español Carlos Fernández se presentó ante el juez federal Leopoldo Rago Gallo para que decida sobre su futuro: o lo mandan de vuelta a su Marbella para que lo juzguen por sus acciones como concejal o lo ponen en libertad y vuelve a inmiscuirse entre los sanjuaninos.
De un lado estará el fiscal federal general Francisco Maldonado, quien representa los intereses de la sociedad argentina ante la justicia nacional. No se sabe oficialmente qué posición tomará el titular del Ministerio Público Fiscal de la Nación en este caso.
Su opinión es clave. En el caso de que el fiscal federal Maldonado entienda que debe ser extraditado, el juez federal Rago Gallo podrá o no hacerse eco de ese planteo.
Pero si el fiscal Maldonado no pide que sea extraditado, el juez federal está obligado a resolver en ese sentido y Carlos Fernández deberá ser puesto en libertad.
¿Por qué? Porque legalmente el fiscal es el dueño de la acción penal en el proceso. Es decir que, si no acusa, todo se cae.