La edil de Cs en Marbella, María García, en una imagen difundida por ella este jueves.
Está al borde de la expulsión de Ciudadanos y tras su última actuación parece que persigue la baja cuanto antes. La todavía edil de Cs en el Ayuntamiento de Marbella, María García, se ha descolgado este jueves con un extenso comunicado en el que trata de boicotear la campaña que lleva a cabo el candidato de su partido, Ángel Mora. Le acusa de haberse escorado a la izquierda, concretamente hacia el PSOE. De hecho, García ya dijo días atrás que votar a la formación liberal en el municipio era “lo mismo que votar al PSOE”.
García, convertida desde hace meses en una especie de concejala número 15 del PP, (los conservadores tienen mayoría absoluta de 14), dice lamentar que su partido y el candidato hayan “confirmado públicamente su definitivo giro a la izquierda”.
La edil ha reprochado “el cambio de rumbo del partido Ciudadanos en Marbella que hasta ahora siempre se había caracterizado por su moderación y por buscar el interés común de los vecinos y que hoy por hoy ha perdido su esencia separándose del centro político y de las políticas liberales, que conforman los principios con los que nació la formación liberal”.
Más allá de lo que piensa ahora García se podría decir que el mes de octubre de 2022 marcó un antes y un después en su proceder como opositora al PP. Fue en esas fechas, concretamente durante la Feria de San Pedro Alcántara, cuando comenzó a hacer seguidismo del equipo de gobierno de Ángeles Muñoz, justo después de que se conociera el auto de procesamiento del marido y el hijastro de la alcaldesa por los presuntos delitos de organización criminal, narcotráfico y blanqueo de capitales.
Fuentes de Ciudadanos ya concretaron a Marbella Confidencial, semanas atrás, que perdieron por completo el contacto con María García a raíz de las primeras informaciones periodísticas sobre los familiares de la alcaldesa.
La edil opositora, que más parece gobernante, lamenta que Mora “haya optado por sumarse a las consignas del partido socialista a nivel local, tanto en las propuestas que presenta en su programa electoral para estas elecciones municipales, como en los argumentos político-electorales expuestos en sus apariciones públicas y en sus manifestaciones contra el Ejecutivo local, uniéndose a la campaña de acoso que el PSOE y OSP vienen llevando a cabo durante meses contra la primera edil, Ángeles Muñoz”.
También incluye como perjudicados por dichas críticas al resto de ediles del PP para censurar que, contra ellos “se han traspasado todas las líneas rojas del juego democrático, dañando la imagen de Marbella”.
Cree García que “el seguidismo, del candidato de CS Marbella al PSOE contra el gobierno municipal del Partido Popular, responde entre otras cuestiones, a la necesidad de hacerse notar y buscar titulares de prensa para obtener réditos políticos y electoralistas, con la única intención de crear una alianza para restar votos a la candidata del PP, sin ofrecer ninguna propuesta de futuro para la ciudad ni defender los intereses de los vecinos de Marbella y San Pedro Alcántara”, subraya en el comunicado difundido.
La portavoz naranja esgrime la excusa de “actuaciones que se investigan en la Audiencia Nacional”, para no entrar al fondo del sumario judicial. Sin embargo, María García jamás ha reclamado explicación alguna ante el hecho de que un ciudadano sueco procesado, considerado testaferro del hijastro de Muñoz, haya obtenido más de 700.000 euros en contratos municipales por obras.
También aprovecha para salir al paso de las críticas que recibió de su partido la semana pasada, a través de un comunicado del comité provincial de CS: “son fruto de la crisis de identidad que está atravesando Ciudadanos tras su refundación el pasado mes de febrero con el cambio de rumbo político y a que los sondeos de intención de voto reflejan, una vez más, unos resultados poco favorables para los comicios municipales”, augura la munícipe.
El candidato de Cs a la Alcaldía de Marbella, Ángel Mora (primero izqda) junto al diputado nacional de su partido, Guillermo Díaz en imagen de archivo. Foto/ Cabanillas
Lo cierto es que la propia García, en su afán de destruir la campaña de Mora, contribuye a darle mayor visibilidad y a que se hable más de él. Este jueves era entrevista en Onda Cero y este viernes recibirá el respaldo de la portavoz de Cs en el Congreso, Inés Arrimadas, que visitará Marbella, concretamente la Plaza de Los Naranjos, pasadas las 13:00 horas, donde atenderá a los periodistas junto al candidato a la Alcaldía.
La “desesperación” de María García y su polémico empadronamiento en un piso de inmigrantes
Fuentes oficiales de Ciudadanos consultadas creen que las últimas declaraciones de María García contra su partido en Marbella y, especialmente, contra el alcaldable, Ángel Mora, son fruto de su “desesperación”, al verse fuera del proyecto de Cs, después de que la dirección provincial ha perdido la confianza en ella, dada su política de oposición, “de continuo seguidismo del equipo de gobierno del PP”. De hecho, estas fuentes creen que más pronto que tarde su edil podría acabar en las filas populares.
Asimismo, destacan su “poco arraigo en Marbella” porque, añaden desde Ciudadanos, reside en Benahavís y permanece empadronada en Marbella en el mismo piso de inmigrantes brasileños en el que se empadronó, que fue descubierto por Marbella Confidencial tras una investigación periodística.
A juicio de Ciudadanos, María García ejercería sus críticas hacia Mora “instigada” por miembros del PP marbellí, quienes la estarían utilizando para tratar de erosionar al máximo a Mora y a Cs y así evitar –argumentan– que el candidato liberal consiga atraer a votantes de Ángeles Muñoz descontentos con su gestión municipal, rodeada de escándalos como está actualmente la también senadora, cuyo ocultación de parte de su patrimonio se investiga en la Cámara Alta.
