El cocinero Marcos Granda (drcha) posa junto al director del restaurante El Lago, Paco García, este martes frente al restaurante Skina de Marbella, donde han ofrecido una rueda de prensa
Los tres cocineros que regentan restaurantes en Marbella con estrella Michelin se han unido para luchar contra los ruidos y molestias que viene denunciando uno de ellos, Marcos Granda, propietario del restaurante Skina, que dice sufrir desde hace meses un auténtico calvario proveniente de la Casa Hermandad del Rocío, a escasos metros, en el Casco Antiguo.
Este martes Grande ha comparecido en rueda de prensa junto al director del restaurante El Lago, Paco García, (una estrella Michelin). Estaba prevista la asistencia del afamado Dani García (dos estrellas) que ha excusado su ausencia pero ha apoyado a su compañero de fogones, al igual que Diego del Río (El Lago).
Comunicado de El Rocío
A pesar del comunicado emitido por la Hermandad que preside Santos Pedrazuela, el pasado mes de septiembre, en el que se comprometían a “no hacer más ruido que el normal de una reunión”, las molestias continúan los viernes y último sábado de cada mes, los días de ensayo del coro. Granda reconoce que su vida se ha convertido en un auténtico infierno, que afecta no sólo a su local, sino también a su vivienda, situada en la planta superior de la misma.
Por lo que respecta al Ayuntamiento, el cocinero asturiano ha dicho que “ellos no están tomando partido por nadie, han tomado medidas y la Policía Local viene cuando se les avisa, no tengo nada que objetar”. Asimismo, se ha congratulado de la presencia reciente en la zona del nuevo jefe de la Policía Local, José Andrés Montoya, que quiso conocer, in situ, la situación con una visita al local rociero.
Se han suprimido las mesas y sillas de la calle
Lo cierto es que ya se ha suprimido la presencia de mesas y sillas en la calle, tras las advertencias de la delegación de Vía Pública del Consistorio marbellí, al carecer de licencia como establecimiento de hostelería. No obstante, Granda denuncia que se siguen concentrando numerosas personas en la calle, con copas en la mano y música alta, que afecta a los clientes del restaurante que regenta.
La abogada que representa al cocinero, Cristina Falkenberg, ha recordado que la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, el Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional son coincidentes al señalar que un nivel de “inmisiones sonoras excesivas es equivalente a la violación del derecho a la intimidad del propio domicilio”.
Condena millonaria al Ayuntamiento de Estepona por ruidos
A preguntas acerca de si se podría estudiar tomar acciones contra el Consistorio, a la vista de la reciente condena millonaria al Ayuntamiento de Estepona por los ruidos de los locales del puerto deportivo, sostienen que es una acción que no se descarta, si bien insisten en destacar y agradecer la “buena colaboración” del Ayuntamiento.
Los afectados creen que el Consistorio marbellí tiene “base legal bastante” para actuar. Se han presentado mediciones por un laboratorio de sonido homologado, que revelan niveles de ruido 41 decibelios superiores a lo permitido. La Ordenanza establece que con un nivel superior en 10 decibelios debe procederse a la clausura de un local, hasta que tome las medidas correctoras que sean necesarias.
