El empresario Tomás Olivo en una imagen de archivo cuando su sociedad General de Galerías Comerciales S.L. salió a bolsa. FOTO/ BME
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Marbella, formado por PP y OSP ha llegado a un acuerdo –rodeado de polémica nada más conocerse– con la empresa General de Galerías Comerciales, propiedad del conocido empresario Tomás Olivo, al frente de La Cañada, para abonarle 12 millones de euros, de un total de 24 que reclamaba a gobiernos anteriores del GIL por un convenio urbanístico de 1995, bajo mandato de Jesús Gil como alcalde y Pedro Román como primer teniente. Concretamente, se trataba de fondos adeudados por no haber recibido los aprovechamientos de dos obras que estaban recogidas en el citado convenio.
Según la extensa documentación a la que ha tenido acceso Marbella Confidencial existe una propuesta que presenta la alcaldesa, Ángeles Muñoz, para ser llevada al próximo pleno ordinario del Consistorio.
En el llamado “acuerdo transaccional”, se plasma que el Ayuntamiento ofrece a la empresa de Olivo “reducir en un 50% el importe de la deuda reclamada judicialmente, quedando la misma establecida en 8,2 millones de principal, más 3,7 millones de intereses de demora, calculados desde el 11 de febrero de 2010, fecha del inicio del cómputo, hasta el 31 de diciembre de 2018, fecha a partir de la cual puede hacerse efectivo el presente acuerdo”, reza el escrito.
Así, con este acuerdo que satisface a ambas partes “CGC renuncia a reclamar al Ayuntamiento de Marbella por el incumplimiento del Convenio de cesión en pago de deudas de 18 de mayo de 1995, declarando ambas partes que nada tienen que reclamarse por ningún concepto en relación con la ejecución de este Convenio”.
La propuesta de la alcaldesa lleva fecha del 14 de enero y va aparejada de un informe favorable del secretario municipal, Antonio Rueda. No obstante, el grupo municipal de IU alerta de un informe del interventor en el que se recogerían numerosas dudas y pegas a este pago.
Izquierda Unida pone de manifiesto que el citado informe del interventor, alto funcionario, plantea el hecho de que mientras sigan vivos dos procesos judiciales, uno penal y otro en el Tribunal de Cuentas por este hechos, Marbella podría demorar el pago a Olivo. Algo que se produce a cuatro meses de las elecciones municipales y antes de que el citado empresario afronte el juicio oral, en la Audiencia de Málaga, en el que Fiscalía solicita para él 18 años de prisión, principalmente por presuntos sobornos al exgerente de Urbanismo de Marbella, Juan Antonio Roca.Todo ello en el marco del convenio urbanístico de La Cañada, que es por el que Olivo reclamaba al Ayuntamiento los 24 millones por las obras y ahora recibirá 12.
Propuesta de Alcaldía del acuerdo transaccional con Tomás Olivo
Rueda de prensa de IU este lunes en La Cañada
Los ediles de IU, Miguel Díaz y Victoria Morales, han ofrecido una rueda de prensa, a las puertas del centro comercial La Cañada, en la que han mostrado su oposición a este acuerdo alcanzado entre la alcaldesa y Olivo (absuelto en el ‘caso Malaya’).
Los concejales han sido muy críticos al denunciar que dicho acuerdo de PP y OSP “deja claro que la corrupción del GIL sigue dañando a Marbella y que Ángeles Muñoz renuncia a defender lo justo para la ciudad”.
La formación opositora asegura que el interventor municipal, en su informe sobre este asunto “objeta al acuerdo de PP y OSP con Olivo y asegura que cabe plantearse si el desequilibro que se reclama no ha sido debido a la propia iniciativa del particular o revela una iniciativa maliciosa del mismo” , ha subrayado Díaz.
Los concejales de IU en el Ayuntamiento de Marbella Victoria Morales y Miguel Díaz este lunes a las puertas de La Cañada. FOTO/ IU
El exteniente de alcalde entre 2015 y 2017 dice tener claro que “si no se pelea día a día para acabar con la corrupción corremos el riesgo de acabar devorado por ella”.
Izquierda Unida va más lejos en sus críticas al considerar que los actuales gobernantes locales “se arrodillan ante Olivo, en lugar de plantarle cara en el juzgado”
Miguel Díaz afirma, además, que las arcas municipales van a a pagar ahora, más de 20 años después, por unas obras que “el dueño de esta empresa acordó en la más absoluta opacidad con Jesús Gil en 1995”.
Los opositores lamentan que esta actuación del bipartito sea “la constatación del fracaso de los controles de legalidad” frente al gilismo.
Versión del PP
Desde el equipo de gobierno local su portavoz, Félix Romero, ha defendido el acuerdo con Olivo, al haber logrado el Consistorio marbella reducir al cincuenta por ciento la cantidad adeudada por anteriores gobiernos del GIL.
El portavoz del equipo de gobierno, Félix Romero, este lunes al término de su rueda de prensa habitual. FOTO/ CABANILLAS
A preguntas de este medio digital Romero ha expuesto que las conservaciones mantenidas con Olivo “son de la etapa anterior”, dando a entender que habrían tenido continuidad con el tripartito que presidió José Bernal, tras los dos primeros gobiernos del PP, extremo que podrá aclarar el exalcalde este martes, al estar prevista una rueda de prensa del dirigente del PSOE.
El edil ‘popular’ ha querido dejar claro que la deuda asumida por el Consistorio es “por condena judicial”, tras ganar el pleito General de Galerías Comerciales.
“Si se puede reducir ese pago a la mitad el interés público de la Corporación lo que precisa es que ese acuerdo se lleve adelante”, ha abundado Romero para defender el acuerdo alcanzando entre ambas partes.
También ha puntualizado que “no vamos perjudicar bajo ningún concepto a los ciudadanos de Marbella”. A su juicio,“lo que aconseja el sentido común y el inter´s público es llevar adelante una transacción de ese tipo”.
Por último ha dicho que cualquier acuerdo que se lleve a Pleno sobre una cuestión de esta índole “tiene que llevar informes de intervención, jurídicos y, en definitiva, todos los papeles que e requieren”.
Tales informes, ha concluido el primer teniente de alcalde,“son garantía de que no se va a producir un perjuicio para la Corporación, porque si se produjese, sería informado por los propios cuerpos”, en alusión a los habilitados nacionales.
