Después de muchos años sin dar con la clave para unir, a modo de simbiosis, la iniciativa pública y privada para la promoción turística de Marbella parece que el Ayuntamiento ha dado con la solución. Se trata del llamado Foro de Innovación Turística, creado cuando José Bernal fue alcalde y que ha sido asumido por la actual alcaldesa, Ángeles Muñoz. Cuando algo funciona para qué cambiarlo.
Sin embargo, hay muchas piezas aún por encajar en esta especie de consorcio. Un ejemplo de la descoordinación se vivió en la última edición de la World Travel Market de Londres, celebrada el pasado mes de noviembre. Marbella contó con un stand propio y muy amplio en el que precisamente faltó la iniciativa privada.
De nada sirve que la alcaldesa haga un llamamiento público, para que los empresarios locales utilicen el stand para captar clientes si luego no va nadie, salvo contadas excepciones. Es aquí donde quiero destacar la presencia del Hotel Los Monteros, con su director Fernando Al-Farkh al frente en la feria londinense.
Me consta que la presencia de Los Monteros en el stand marbellí fue muy provechosa. De hecho, Al-Farkh asegura que han cerrado importantes contratos.
Se da la circunstancia de que una conocida cadena hotelera local, como es Fuerte Hoteles, tenía stand propio en Londres, a muy escasos metros, y sus responsables ni siquiera se acercaron a la inauguración del stand de Marbella. Esto resulta asombroso, si se tiene en cuenta que su director general, José Luque, forma parte del Foro Turístico auspiciado por el Ayuntamiento y en el que están la CEA y por ende el CIT.
El papel del CIT
Por lo que respecta a la patronal empresarial marbellí (CIT), presidida por Juan José González, cabría también preguntarse por qué no envía ningún representante a las ferias internacionales como Londres, Berlín o Rusia. No parece que se trate de una razón presupuestaria, si se tiene en cuenta que este colectivo aglutina a más de 600 empresas, que lo financian como socios. La estancia de un directivo del CIT y su vuelo sería el chocolate del loro.
En lo de la productividad de las ferias internacionales hay siempre división de opiniones, pero no puede ser que Marbella tenga stand propio y haya ratos del día que las mesas habilitadas estén vacías, porque el empresariado no acude a captar clientes potenciales. Esta no es la imagen deseable en un destino como el nuestro.
Me consta también que numerosas agencias de turismo del golf británicas, así como agencias chinas dedicadas al sector del turismo de compras se interesaron por Marbella y acudieron. Lo digo porque lo ví con mis propios ojos. Ahí está la labor de los trabajadores de la delegación de Turismo municipal y especialmente de Otti Díaz Ambrona, que se multiplicó como pudo para atender a todos estos agentes.
Durante el anterior mandato del equipo de gobierno tripartito había una especie de fijación, casi obsesiva, por parecerse a la Costa Azul. Conviene destacar aquí que esos destinos en los que se miraban Bernal y su concejal de Turismo, Javier Porcuna, como Saint Tropez, Niza o Cannes, ni siquiera contaban con stand propio en Londres y se englobaban en uno común: Costa Azul.
Cabría plantearse si Marbella debe seguir mirándose en el espejo francés, o buscar la identidad propia que siempre ha tenido.
Medalla de la Ciudad para Rafael de la Fuente
Esta semana el PSOE proponía la Medalla de la Ciudad para un grande del turismo a nivel local y provincial. Se trata de Rafael de la Fuente, que además es miembro del Foro Turístico de Marbella. Bien merecida esta distinción sobre la que, espero, haya unanimidad.
A la vuelta de la esquina está Fitur, a la que Marbella acudirá de nuevo con stand propio y fiesta por todo lo alto en el Consulado de Italia, tal y como adelantó Marbella Confidencial días atrás.
En la feria turística de Madrid habrá patrocinadores en el stand marbellí que aportarán fondos. Lo que sí cabe pedirle al Ayuntamiento es que, por la imagen de la ciudad, mire con lupa quiénes son los sponsors y si están a la altura de lo que se quiere promocionar.