El concejal de Seguridad Ciudadana, Javier Porcuna, junto al jefe de la Policía Local, José Andrés Montoya, en imagen de archivo
El enfrentamiento entre el delegado de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Marbella, Javier Porcuna (PSOE), y el exjefe de la Policía Local se agiganta. Tras las duras críticas y acusaciones de supuestas irregularidades vertidas este martes por el edil sobre la gestión del mando policial, éste ha asegurado a Marbella Confidencial que “la autorización verbal” otorgada por Porcuna al festival Starlite, el pasado verano, para que prolongara su horario, como recinto de discoteca, hasta las siete de la mañana, “se hizo constar en las actas levantadas por los agentes que se personaron allí”, a raíz de una serie de denuncias.
Montoya ha relatado a este medio digital la extrañeza de sus subordinados, cuando los encargados del evento musical y de ocio les aseguraron que el teniente de alcalde había autorizado tal horario porque, según afirma el exjefe policial, “una autorización verbal no sirve de nada”. El citado permiso otorgado por el edil socialista figuraría en al menos cuatro actas levantadas por los agentes que acudieron en distintas ocasiones.
“Las autorizaciones verbales no valen, porque nosotros [la Policía Local] estamos sujetos a las normas administrativa, y la nomenclatura es muy concreta sobre este asunto”. Montoya ha precisado que la actividad que desarrollaba Starlite estaba “definida” y en base a esa “consideración” se estipulaba que estaba autorizado como auditorio, para conciertos, con el permiso correspondiente. “Se especifica el aforo, el horario de cierre, las dos de la mañana y demás, eso es lo que hay en papel”, recalca en cuanto a lo que se exige al responsable de la actividad.
Tras las denuncias del abogado Arafat, una vez que se persona la Unidad Administrativa de Policía Local en la puerta de Starlite, “se les comunica que había una autorización verbal”. Las visitas policiales no estaban relacionadas sólo con el horario de cierre, sino también con otros aspectos como que el evento no contaba con hojas de reclamaciones.También se habría tratado de inspeccionar lo relativo a posibles desprendimientos.
El exjefe del cuerpo, que ha negado cualquier interés personal en inspeccionar Starlite, tras las aseveraciones de Porcuna, niega también haber acudido en persona a las inspecciones: “Sólo estuve el día de la inauguración de la temporada”, recalca.
Porcuna aseguró este martes que en el proyecto que presentó Starlite se recogía el horario de cierre a las 7 de la mañana. Montoya rebate esta afirmación: “el organizador podrá plantear lo que quiera, pero la administración es la que concede la autorización, y dentro de ella el horario de cierre se fija en base a lo que dice la normativa, no en lo que dice el promotor, o el organizador del evento”, subraya el ahora intendente de la Policía Local de Vélez-Málaga.
Montoya basa sus argumentos en “el decreto 78/2002 de 26 de febrero de la Junta de Andalucía en el que se aprueba el nomenclator de espectáculos públicos”.
La autorización es para una actividad extraordinaria de carácter ocasional, entonces se hace por cada temporada. En cuanto a la versión de Porcuna sobre que el actual equipo de gobierno se ha limitado a hacer lo que venía haciendo el anterior Ejecutivo del PP, Montoya sostiene que “el hecho de que una cosa se haya hecho mal durante mucho tiempo no significa que cuando haya que ir a comprobarlo esté justificado, si se ha hecho mal y le ha tocado a usted [Porcuna] es porque antes nadie presentó una denuncia”.
Así pues, para Montoya “no tiene justificación” que Porcuan se ampare en lo que ha hecho el PP hasta ahora con respecto a Starlite para basar sus actuaciones como edil delegado de Industria.
El exintendente policial marbellí, anuncia además, que ya ha puesto en manos de sus abogados todas las acusaciones vertidas contra él por el que fuera su jefe inmediato político, por lo que, presumiblemente, este enfrentamiento terminará en los tribunales.
