El Partido Popular de Marbella ha puesto este martes en marcha toda su maquinaria electoral, de cara a las elecciones autonómicas anticipadas del 22 de marzo. Durante su discurso ante el Comité Ejecutivo de la formación conservadora su presidenta y alcaldesa, Ángeles Muñoz, ha arengado a los militantes para llevar a cabo “casa a casa y puerta a puerta”, una campaña electoral “contra las políticas de la Junta de Andalucía a nivel local”. Pretenden “recordarle” a la administración regional “todo lo que le debe a Marbella”.
La estrategia de los populares, nada novedosa y que dio sus frutos especialmente en la campaña de las municipales de 2007, es trasladar al ámbito del municipio todos los reproches dirigidos al Gobierno andaluz en materia de inversiones en equipamientos e infraestructuras, principalmente. Muñoz ha hablado de los próximos comicios del 22 de marzo como “una primera vuelta” de las municipales.
Críticas hacia los “intereses personales” de Susana Díaz.
Muñoz ha comenzado su intervención en la abarrotada sede de Nuestra Señora de Gracia arremetiendo contra la presidenta de la Junta, Susana Díaz, por el adelanto electoral, al basarse –según ha dicho– “en sus intereses personales y partidistas”. En este punto, ha calificado de “fracaso estrepitoso” el ya extinto bipartito entre PSOE e Izquierda Unida.
“Si lo que quiere es hacer ingeniería dentro de su partido que no utilice a los andaluces”, ha dicho la también presidenta de la FAMP para señalar a Susana Díaz y sus aspiraciones a responsabilidades más altas dentro del PSOE federal, negadas por ella en los últimos días.
Muñoz también ha repartido críticas a Izquierda Unida, formación a la que ha acusado de “haberle tapado todo al PSOE” durante el tiempo que ha durado el gobierno de coalición. Al hablar de la federación de izquierdas, Muñoz ha elogiado “el pacto entre Izquierda Unida y el PP en Extremadura, porque estaban hartos del Partido Socialista”.
Realmente no existe pacto de gobierno, porque IU de Extremadura no forma parte del Ejecutivo que preside Monago. Tan sólo apoyaron su investidura, desafiando la negativa del consejo federal presidido por Cayo Lara.
Guiño preelectoral hacia IU poniendo como ejemplo “el pacto de Extremadura”
Como si de un guiño preelectoral se tratara, para trasladar el acuerdo de Extremadura a Andalucía, Muñoz ha dicho que “los dos partidos tienen muchísimos puntos en desacuerdo, pero cuando hay un compromiso de sacar adelante una región se tienen que buscar puntos de encuentro”. No cabe duda de que el candidato del PP-A Moreno Bonilla intentará esa jugada, si la aritmética se lo permite. Ya lo hizo Arenas tras ganar con mayoría simple las elecciones de 2012. Al día siguiente llegó a ofrecerse a IU para gobernar juntos. También se ofreció al PSOE.
No han faltado las alusiones a Podemos, formación a la que la alcaldesa de Marbella sigue sin nombrar. Ha alertado sobre “el partido mediático”, aquellos –ha dicho– que “hacen promesas que luego no podrán cumplir”. Tambiénes les ha llamado “el partido que no se ha presentado a unas elecciones”.
Desvela los nombres de su núcleo duro de campaña
Muñoz ha desvelado los nombres de su núcleo duro de campaña, porque se ha resistido a nombrar a un jefe de campaña, al contrario que en otros comicios. Los elegidos son : el secretario general, Manuel Cardeña; el concejal y parlamentario José Eduardo Díaz; el concejal y vicesecretario local, Diego López; la presidenta de NNGG, Melania Leiva y la concejal de Comunicación, Chela Figueira.
La presidenta del PP de Marbella se ha mostrado “convencida” de que van a tener “un buen resultado” en las autonómicas. Sostiene que el partido dispone de “buenos sondeos” en clave municipal. Por ello, su idea es “trasladar” esas encuestas a la batalla diaria de la campaña en la que Juan Manuel Moreno Bonilla será, salvo sorpresas, quien encabece la lista al Parlamento por la provincia de Málaga.
Al término del acto, marbellaconfidencial ha preguntado a Ángeles Muñoz si es partidaria de incluir de nuevo al concejal José Eduardo Díaz en la lista por Málaga. Su respuesta no ha podido ser más escueta: “no soy yo la que lo tiene que ver y lo debatiremos internamente en el partido”, ha sentenciado.