Imagen del interior del centro comercial La Cañada
Una madre lactante de San Pedro, Roser Sabater, ha criticado este miércoles que una dependienta le pidió que abandonara una tienda del Centro Comercial La Cañada cuando se disponía a amamantar a su bebé, una niña de tres meses. Por ello, está organizando una protesta para el 5 de noviembre en el Centro Comercial.
Sabater, ha señalado a Europa Press, que acudió en la mañana de este martes a una zapatería del centro comercial con una amiga. Mientras su compañera se probaba unos zapatos, la niña le pidió que le amamantara. Pocos minutos después, una dependienta del establecimiento le “invitó” a que, en virtud de la una norma de la tienda, se fuera a los aseos del complejo comercial, que disponen de sala de lactancia, ante la posibilidad de importunar a los clientes.
Cuando la madre se marchaba a los lavabos, su amiga le animó a que volviera a la tienda e interpusiera una reclamación. “Le dije a la dependienta que yo entendía que es una mandada y tiene que hacer lo que le han dicho. Pero también que no me parecía justo y que no se daban cuenta de que denigran a la mujer y al niño. No es justo que pasen estas cosas en el siglo XXI”, ha indicado.
Sabater ha asegurado que llevará su protesta “hasta el final, hasta donde pueda”. “Un establecimiento no te puede echar por dar de mamar. El derecho de admisión es ilegal, no se puede usar así. No puedes discriminar por la condición de un momento dado de una persona y una mujer lactante es, en un momento dado, una condición en la que se encuentra”, ha indicado la madre lactante, que asegura que se ha asesorado legalmente sobre el derecho de admisión.
Asimismo, ha asegurado que le molestó que le instaran a abandonar la tienda por “poder desagradar a los demás”. “Si me ofrecen la sala de lactancia porque me dicen que ahí voy a estar más cómoda, no hay problema. Pero que me lo digan para esconderme para que no me ven los demás, no es justo”, ha lamentado.
Sabater ha asegurado que nunca había pasado por una circunstancia similar. “Había visto casos por las redes sociales y nunca pude entender cómo pasaba eso. Pensaba que era algo que ocurría en otros países. Vivo en San Pedro y la gente siempre me dice que no me tape cuando amamanto a mi niña, a pesar de que soy muy pudorosa, porque es lo más bonito del mundo. Siempre me he sentido muy arropada. Me he quedado en shock porque no me lo esperaba”, ha agregado.
Ha asegurado que la niña “lleva unos días bastante nerviosa y esta cada dos por tres pidiendo que le dé el pecho”. “Pide pecho cada media hora o cada hora. Tendría que encerrarme en mi casa y no salir porque no podría ir a ningún lugar”, ha lamentado.
Por último, la madre ha asegurado que la movilización será “pacífica y respetuosa” pero con el objetivo de “que la gente se dé cuenta de que pedimos algo digno y justo para las mujeres lactantes”.
