El teniente de alcalde de San Pedro Alcántara (Marbella), Rafael Piña, junto a la asesora de Turismo y Comercio de OSP Silvia Ruiz, miembro a su vez del Consejo Consultivo del partido, este jueves en rueda de prensa. FOTO/ Ayto de Marbella
“O estamos con la ley, o estamos con el rifirrafe político”. Así se ha expresado este jueves el teniente de alcalde de San Pedro Alcántara, Rafael Piña, a la hora de anunciar el voto de Opción Sampedreña (OSP), en sintonía favorable con el PP, a la hora de de subsanar un”error”, que el PSOE denuncia como una nueva modificación de la linde entre Marbella y Benahavís. Este cambio beneficiaría “intereses personales” de la alcaldesa, Ángeles Muñoz, tal y como expuso José Bernal.
A preguntas de los periodistas, acompañado por la asesora de Comercio y Turismo de OSP, Silvia Ruiz, el teniente de alcalde sampedreño ha reconocido que “ayer” (por el miércoles) cuando vieron la noticia de la rueda de prensa del PSOE “nos quedamos un poco… qué ocurre aquí”. Fue entonces cuando pidieron reunirse, de forma urgente, con la delegada de Urbanismo, Kika Caracuel, y el director general del área, José María Morente. Una cita a la que también asistió la alcaldesa.
“Aquí estamos hablando de la adaptación a la LOUA del Planeamiento del 86, no estamos hablando de un cambio de lindes, sino de un dibujo de unas lindes en un Plan”, ha añadido el edil. Por si quedaba alguna duda de cuál será su voto, apunta lo siguiente: “cuando nos dieron la documentación pertinente, evidentemente nuestro pensamiento está muy claro”.
“Parece mentira la distancia en la que se encuentra el PSOE con respecto a sus compañeros de la Junta de Andalucía, es bestial, por no decir abismal”, ha criticado el munícipe para tratar de sembrar división entre los socialistas marbellíes y el Gobierno de Susana Díaz.
Piña, que ha leído al pie de la letra el folio que mostró este miércoles Caracuel en rueda de prensa, relativo a una notificación de la Junta de Andalucía, fechada el 16 de febrero, nada ha dicho, sin embargo, sobre la alegación que presentó la comunidad de propietarios de Vega del Colorado, una urbanización representada por uno de los abogados de la alcaldesa y su marido, el letrado Juan Luis Balmaseda. Se trata ya de un personaje de sobra conocido, exadministrador único de la sociedad propietaria de la mansión del matrimonio: Crasel Panorámica S.L., propiedad de la gibraltareña Crasel Limited, a la que también representó este exteniente de alcalde del GIL.
Tal y como informó este miércoles Marbella Confidencial, el Consistorio marbellí aceptó la alegación de la citada comunidad de propietarios y sus argumentos son parte fundamental, por no decir clave, para modificar la linde. Todo ello al margen de la versión ofrecida por el equipo de gobierno, sobre que actúan al seguir una directriz de la Junta de Andalucía.
El PSOE ha recordado a Piña su beligerancia sobre el deslinde, cuando era opositor al PP, y le ha pedido que votara en contra
Dos horas después de pronunciarse Piña, cuando aún no habían trascendido en los medios sus declaraciones en apoyo del PP, de cara a la Comisión Informativa de este viernes, la edil del PSOE Isabel Pérez, pedía a OSP que “se posicionara en contra de la corrección de errores en las comisiones informativas para que el asunto no vaya al pleno”.
De hecho, la exedil de Urbanismo ha subrayado que “está en manos de Rafael Piña dar carpetazo al asunto de las lindes”, dada su beligerancia con respecto a las pretensiones del PP cuando era opositor e incluso cuando gobernaba junto al PSOE e IU, pero ahora todo ha cambiado y Piña hace piña con sus socios conservadores.
OSP ante el deslinde: de la contundencia en la oposición a la contradicción como gobierno
Por medio de un comunicado, Pérez recuerda que “la corrección de errores” que se pretende aprobar “dibuja una linde con Benahavís distinta a la legal”,algo que a su juicio podría impedir que este asunto se incorporase al orden del día del pleno ordinario del 27 de julio.
“Piña tiene la ocasión de recuperar mínimamente su credibilidad ya que fue un gran defensor de la integridad del término municipal, antes de firmar una moción de censura para devolver a Ángeles Muñoz al sillón de la Alcaldía”, le ha reprochado la concejala opositora a su antiguo aliado.
Por otra parte, Pérez ha lamentado que trascurridas 24 horas desde que el PSOE exigiese explicaciones sobre el cambio de planos, “Ángeles Muñoz todavía no haya aclarado su insistencia y empeño en regalarle 170.000 metros cuadrados a Benahavís”
La exedil de Urbanismo considera que, “o bien Kika Caracuel es absolutamente negligente a la hora de gestionar algo tan sensible como la adaptación a la LOUA, o miente descaradamente porque sí que hay una alegación de Vega del Colorado”, dice en alusión al documento del que la concejala del PP dijo “no me suena”.
En dicha alegación se pide modificar la linde, añade Pérez, al tiempo que remacha lo siguiente: “la alegación está aceptada por el equipo de gobierno, cuando saben que no se puede modificar la linde con una alegación, ni con un Plan General”.
La solicitud de la Junta explicada desde el PSOE
Por lo que respecta a la solicitud de la Junta, invocada por PP y OSP, Pérez aclara que la administración autonómica “solo ha pedido que se deje el límite del término municipal vigente, es decir el del Texto Refundido, pero lo que hace Ángeles Muñoz es aprovechar para modificar la linde”, denuncia una vez mas.
Para los socialistas “el argumento de culpar a la Junta cae por su propio peso, más si tenemos en cuenta que fue la administración autonómica la que archivó el expediente de alteración”.
Por último, Isabel Pérez insiste en que en el Texto Refundido “se dibujan las lindes del año 1986 y las históricas; y en ambos casos los terrenos en los que Ángeles Muñoz tiene intereses permanecen en Marbella”, en alusión a su mansión y a los suelos de sociedades participadas por familiares de la también senadora conservadora.
Pérez concluye, a modo de reproche a la gobernante marbellí, que “lo que hace ahora es dibujar la linde del plan anulado de 2010, con la consabida polémica que se está investigando en los tribunales sobre la falsificación del mismo”, en clara referencia al llamado ‘caso PGOU’.
