La Guardia Civil y la Policía Nacional intervinieron el pasado día 12 de septiembre en una matanza clandestina de corderos en San Pedro Alcántara (Marbella), una actividad que realizaban sin control higiénico ni sanitario.
Los hechos tuvieron lugar cuando agentes del Cuerpo Nacional de Policía identificaron a dos individuos de origen magrebí que salían con un vehículo de una finca e inspeccionaron el mismo, encontrando en el maletero tres corderos degollados y abiertos en canal, por lo que denunciaron al conductor a la Ley de Sanidad Animal y detuvieron al acompañante por estancia irregular en España.
Los policías pusieron los hechos en conocimiento del Seprona de la Guardia Civil de Marbella, quienes establecieron un dispositivo para inspeccionar el lugar ya que tenían indicios de una posible matanza irregular de corderos con motivo del Eid al-Adha o Fiesta del Cordero que celebran los musulmanes, según han informado desde el instituto armado en un comunicado recogido por Europa Press.
Los agentes, al atardecer, sorprendieron a tres personas de origen subsahariano despiezando dos corderos en unas cabrerizas, careciendo de todas las medidas higiénicas y de salubridad. En dichas instalaciones se identificó a un ciudadano español, propietario de las instalaciones, que fue denunciado por la matanza ilegal, por la tenencia de corderos sin identificación y sin registrar y por la posesión de corderos con crotales identificativos pertenecientes a las cabras de la explotación, utilizado para no ser detectados como irregulares durante una posible inspección de los agentes y veterinarios competentes.
En esta última actuación se intervinieron otros cinco corderos vivos, y los despieces de los dos corderos muertos. Desde la Guardia Civil han recordado que la tradición lleva a que familias musulmanas sacrifiquen un cordero, el problema surge en las matanzas clandestinas en explotaciones ganaderas o fincas particulares sin las mínimas condiciones higiénico-sanitarias, con el consiguiente riesgo para la salud pública, siendo autorizadas para el sacrificio de rumiantes solo en mataderos autorizados.
Las denuncias de los agentes han sido remitidas a la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta De Andalucía, siendo retirados los animales muertos para su destrucción.