Albert Rivera ha apostado este miércoles en Málaga por la creación de un gobierno de “apertura”, al que se incorporaría “gente de otros partidos políticos”, en clara alusión a ministros que no fueran de Ciudadanos. Lo ha hecho ante un Palacio de Congresos lleno hasta la bandera (1.500 personas) y cerca de 200 que se han quedado fuera del aforo previsto.
El líder de C’s se ha mostrado “convencido” de que podrá formar un gobierno “con talento”, frente a la “mediocridad”, en clara alusión al actual Ejecutivo que preside en funciones Mariano Rajoy, a quien se ha dirigido para responderle sobre la “falta de experiencia” del partido naranja
“A mí no me da miedo que una persona válida de otro partido con capacidad pueda formar, como independiente, parte de un gobierno de Ciudadanos”. Es en esta frase de Rivera donde surgen algunas dudas: habla de incorporar a personas de otros partidos, pero de su discurso se desprende que una vez dentro del Ejecutivo que él presidiera tendrían que abandonar sus siglas de origen, si es que quiere que sean “independientes”.
Ha citado a Sarkozy para decir que “no le tienen miedo cuando incorpora a un socialdemócrata, o a un centrista liberal”. También ha mencionado a Obama, por contar con “asesores republicanos”, así como al actual primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, por reunir a personas de diferentes ideologías en su gabinete.
“No tenemos experiencia en construir aeropuertos sin aviones”
“En lo que no tenemos experiencia es en construir aeropuertos sin aviones”. Ha contestado a Rajoy, en un tono muy crítico con el Partido Popular, al denunciar que se trata de “gente que ha saqueado España”, ha dicho al hilvanar un discurso centrado en recalcar casos de corrupción como el de Bárcenas, “el saqueo de las cajas de ahorros”, o el de las ‘tarjetas black’ de CajaMadrid. Rivera se ha preguntado si todo ello era serio, frente al lema de campaña del PP, ‘España en serio’.
A la hora de contraponer talento frente a mediocridad no han faltado las alusiones a los dirigentes del PP Rafael Hernando y Carlos Floriano, quienes por sus críticas hacia C’s contribuyeron durante la pasada campaña electoral de las autonómicas y municipales a darles mayor proyección y publicidad, sobre todo en las redes sociales, granero de votos de la marea naranja.
El discurso del líder catalán –de orígenes malagueños a los que ha hecho alusión en profundidad– ha estado marcado en todo momento por su idea de defender “un proyecto común para España”. Un país, ha dicho, que “no se rompe, no se toca y no se negocia”.
“Pablo Iglesias quiere contentar a Mas”
De hecho, Rivera ha entrado en el cuerpo a cuerpo con el líder de Podemos, Pablo Iglesias, a quien ha reprochado que quiera “contentar a [Artur] Mas”, con su idea de convocar un referéndum, algo que para el candidato a la presidencia del Gobierno por Ciudadanos no es necesario, “porque ya somos españoles”.
A juicio del líder de la formación naranja “la peor pesadilla que puede tener el señor Mas, va a ser encontrarse de nuevo conmigo, porque le vamos a decir que no aproveche la crisis española para romper España. Se lo diré en catalán”, en alusión a su hipotético papel como sucesor de Rajoy en Moncloa.
“Ciudadanos está consiguiendo que el conjunto de españoles vuelvan a querer a Cataluña”. Esta ha sido otra de sus frases más aplaudidas tras la intervención de Inés Arrimadas, casi más ovacionada que el líder del partido. La jefa de la oposición en Cataluña también ha hecho referencia a sus orígenes andaluces, de Jerez.
Discurso en clave de Málaga
Ya en clave de Málaga, Albert Rivera ha dicho que su formación lucha “por ser la primera” en la provincia. Ha destacado el 25% que le otorgan las encuestas, algo que le hace pensar en “un buen número de diputados”. La última encuesta del CIS otorgaba 4 escaños al PSOE y pronosticaba un empate a 3 entre PP y C’s. Hay mucho partido que jugar.
No se ha olvidado de los casos de corrupción habidos en la provincia y ha apostado por la siguiente tesitura: “Málaga tiene que elegir entre ser una Silicon Valley, o la Málaga del pelotazo urbanístico”. La apuesta de Rivera es potenciar al máximo el Parque Tecnológico. Pretende crear “30 centros de transferencia tecnológica” con la capital de la Costa del Sol como eje vertebrador del proyecto.
Rivera ha querido despedirse con símiles futbolísticos y automovilísticos, al asegurar que “estamos en la final y somos segundos”, por detrás del PP, “que tiene las ruedas gastadas y le queda poca gasolina.
Sobre el líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha dicho que “está más preocupado en mirar para abajo, a Podemos que hacia arriba”. No se ha olvidado de la rivalidad entre el candidato socialista y la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz.
Como colofón, antes de despedirse para su siguiente cita en la agenda de campaña, la ciudad de Toledo, Rivera ha querido mencionar la famosa frase del presidente Kennedy: “no te preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tú por tu país”.