El equipo de gobierno del PP trataba de aparentar hasta hoy que el surgimiento de un movimiento contra la cesión de terrenos a Benahavís no le importaba. A medida que el asunto ha pasado al ámbito nacional de los medios de comunicación se evidencia que está entre las principales preocupaciones de la alcaldesa, Ángeles Muñoz.
Este martes el portavoz municipal del PP, Félix Romero, ha dedicado gran parte de su comparecencia semanal, posterior a la junta de gobierno local, para arremeter contra el movimiento ciudadano surgido contra la cesión de terrenos a Benahavís. Ha asegurado que el Ayuntamiento de Marbella “no ha alterado ningún lindero”.
“Linderos definidos en 1978”
El brazo derecho de Ángeles Muñoz ha insistido en que los linderos de Benahavís, en lo que se refiere a la urbanización El Colorado, “ya estaban claramente definidos en el año 1978”.
Ha aportado un certificado expedido por el Consistorio benahavileño, del 11 de noviembre de 1978, sobre que “en base a los antecedentes sobrantes, la finca El Colorado, propiedad de Pedro Flores García, se encuentra totalmente enclavada en el término municipal de Benahavís, según resultado del deslinde efectuado con el Ayuntamiento de Marbella”.
Acusaciones de manipulación
Romero, ha acusado al colectivo de “manipulación”, “mentiras”, llevar a cabo “un montaje”, así como de “ser los mismos” que han estado vinculados a otras plataformas críticas con determinadas actuaciones municipales.
Se ha olvidado de mencionar a Miguel Lima, precursor del nuevo movimiento en Facebook, antes nunca vinculado a protesta alguna, así como a José Manuel Beltrán, ciudadano marbellí en la misma condición que Lima.
Sorprendentemente, el primer teniente de alcalde ha asegurado que “quien inicia el expediente de oficio sobre la alteración de los términos municipales es la Junta de Andalucía en febrero de 2010”.
Romero niega que Muñoz y Mena firmaran un acuerdo
Al ser preguntado por el acuerdo que firmaron la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz y su homólogo benahavileño, José Ántonio Mena, en diciembre de 2008 –previo al pleno en el que se aprobó el inicio del deslinde– el edil del PP ha dicho que “no hay ningún acuerdo entre alcaldes”.
El munícipe gobernante sostiene que en la memoria de la Junta de Andalucía, aportada este expediente, “el único acuerdo al que se alude es a un acuerdo cerrado entre el alcalde de Benahavís y el alcalde de Marbella en 1985”.
Ha reiterado que “no ha habido un acuerdo entre los ayuntamientos de Marbella y Benahavís, sino un reconocimiento de una realidad preexistente”, ha dicho tras mencionar una alegación de 1985 aprobada en el Pleno marbellí cuando gobernaba el entonces alcalde del PSOE José Luis Rodríguez.
Críticas a Andrés Cuevas y Rafael García Conde
En este punto, Romero ha aprovechado para recordar que “Andrés Cuevas y Rafael García Conde eran concejales de Izquierda Unida en aquel pleno de 1985 donde se aprobó esta alegación” sobre la modificación de los linderos con Benahavís.
Cuevas es actualmente “cargo de confianza de Izquierda Unida”, ha recordado el portavoz del PP. Por lo que respecta a Cruz Conde, es flamante miembro del Consejo Ciudadano de Podemos, cuyo secretario general es Lolo González. Todos ellos estuvieron presentes en la primera reunión del colectivo anti deslindes, de ahí que los populares exploten este argumento.
Así pues, Romero sostiene que “todo sigue igual desde 1973”, en relación con los linderos entre Marbella y Benahavís. Si es así, resulta difícilmente comprensible entender por qué el afán de Ángeles Muñoz en firmar el citado acuerdo con el alcalde de Benahavís para la segregación de terrenos objeto de la polémica. Lo hizo en diciembre de 2008, de cara a la aprobación el nuevo PGOU de Marbella.
Huelga recordar que Muñoz y su familia tienen intereses personales en los terrenos que se ceden al municipio vecino. De hecho, la lujosa mansión de la regidora, valorada en casi 5 millones de euros, se encuentra justo en el lindero y con la modificación pasa íntegramente a Benahavís. Luego están los 120.000 metros donde su marido y su cuñado llevarán a cabo 50 villas de lujo, al convertirse los suelos en urbanizables.
Mención especial para Javier de Luis
Otro de los aludidos especialmente por Romero ha sido Javier de Luis, conocido ecologista y miembro activo del nuevo movimiento ciudadano. El teniente de alcalde ha recordado la “querella criminal”, por presunta prevaricación en el acuerdo del deslinde con Benahavís, que interpuso De Luis contra la alcaldesa cuando era concejal independiente del PSOE. Un juez la archivó.
A quien no ha nombrado en ningún momento el edil del PP es a la arquitecto Carola Herrera, integrante de otros movimientos anteriores y del nuevo. Ella ha sido muy crítica con la gestión de Ángeles Muñoz en el ámbito urbanístico y medioambiental. Parece claro que la estrategia de los populares es no nombrar a Herrero, ante su creciente protagonismo y alto nivel de conocimiento entre los ciudadanos de Marbella.
Carta a Don Félix Romero
EL LENGUAJE POLÍTICO DE D. FÉLIX ROMERO, ALEJADO DE LA CIUDADANÍA.
PROPUESTA PARA UN DEBATE PÚBLICO EN TV.
¡No somos políticos, Sr. Romero! ¡Somos ciudadanos! Quizás esa sea una de las razones por la que no le entendemos, sea a usted o a la Alcaldesa, cuando dicen haber explicado “más de cien veces” el polémico asunto del deslinde entre los municipios de Marbella y Benahavís.
Desde su privilegiada atalaya del Ayuntamiento de Marbella (que pensamos también es el nuestro) ha comparecido ayer en su habitual rueda de prensa, posterior a la Junta de Gobierno Local, para lanzar acusaciones que no comprendemos contra el movimiento ciudadano surgido en días pasados en oposición al ya citado deslinde. Nosotros no tenemos posibilidad de usar esa misma tribuna y quizás, como ciudadanos, deberíamos poder usarla. Ese es el motivo por el que nos dirigimos a usted de esta forma. Ya sabe: prebendas del cargo político, que no del ciudadano.
Nos acusa de “manipulación”, “mentiras”, de llevar a cabo un “montaje” y de “ser los mismos” que hemos estado vinculados a otras plataformas críticas. ¡Que poco nos conoce, Sr. Romero! Los firmantes de esta misiva, aún estando en nuestro derecho constitucional, no somos “los mismos” a los que usted se quiere referir. Aún si así fuera ¿sería esto ilícito? ¿Le reprochamos a usted ser el mismo al militar en su formación política? ¿Nos reconoce usted nuestra libertad de expresión y de crítica?
En su comparecencia todo su afán se enfoca en arremeter contra formaciones políticas y personas adscritas a las mismas y, manipulando la realidad, querer hacer ver que esta iniciativa ciudadana es lo mismo ¡No, Sr. Romero, da usted en hueso! Eso si, no olvide que seremos los ciudadanos los que en poco tiempo votaremos qué dirigentes son leales con el patrimonio de todos; los que sabremos discernir qué concejales de Marbella -con nombres y apellidos y que nos representan a todos- han votado a favor para que parte de nuestro territorio pase a manos de otro; los que pensamos que no es ético y moral que una Alcaldesa promueva y vote a favor de un asunto donde tiene intereses directos.
Suponemos, y le creemos capaz para ello, que esa “mentira”, esa “manipulación”, ese “montaje” y esa documentación que usted muestra -a lo lejos- pueda ser contrastada con nuestros argumentos y con nuestra documentación. ¡Ya ve! Sólo le pedimos una charla pública, un debate abierto -en directo, claro- en el medio de comunicación audiovisual que usted elija. Un diálogo con los ciudadanos porque esa será la mejor forma de demostrarle hasta donde llega nuestra “manipulación”.
Estamos seguros que, con su talante liberal, abierto a la ciudadanía y al diálogo, al contacto directo con los ciudadanos de Marbella y San Pedro, usted no pondrá impedimento ¡Qué mejor para aclarar los conceptos que dialogando!
Nosotros, como ciudadanos, le estamos esperando. Ahora, como dice el dicho popular, “la pelota y la credibilidad la tiene en su tejado”. Esperamos su respuesta para iniciar el partido.
Hasta entonces, reciba un cordial saludo.
Miguel Lima Laury Roco, José Manuel Beltrán López Cristina Falkenberg
Precisamente ha sido la cercanía de las elecciones lo que ha llevado al equipo municipal a llevar al pleno la cesión de los terrenos, con total desprecio del daño que podía causar a la imagen del partido (habrán pensado que un poco más no importa), al abordar un tema tan sensible y personal en unos momentos como los que vivimos. El movimiento ciudadano ha surgido – como una consecuencia natural – en el plazo de exposición pública y no me parece que esté dirigido por líderes políticos, sino por personas con gran solvencia técnica y ninguna sospecha de pretender ganar nada en el empeño. En cualquier caso, esas personas – que nos deben inspirar a todos un gran respeto – sí que van a perder, aunque sea su tiempo y su esfuerzo, que pocos les van a agradecer en el futuro. Los que también vamos a perder, y también a correr un grave riesgo, vamos a ser los ciudadanos que pretendemos vivir en una sociedad estable y que empieza a recuperarse. Y si hay políticos que se han enganchado al carro, pues o no serían políticos o serían tontos, para no aprovechar una oportunidad que se les ofrece en bandeja.
Lo más preocupante de esta situación es que no se trata de un caso de corrupción, aunque una gran parte de la ciudadanía lo esté ya sintiendo así. Estamos hablando de la utilización aparentemente legal del estado de derecho para el propio beneficio, con la enorme dificultad existente de definir la delgada línea que la separa del primer supuesto. Y con la enorme diferencia de medios de los que disponen cada uno de los lados de las posturas encontradas. Públicos, ilimitados y gratis para unos. Privados, generalmente escasos e irrecuperables, para otros. Si esta utilización finaliza con éxito, constituirá un ejemplo de ingeniería a seguir para los que pretendan en el futuro lucrarse con el servicio público. Y un motivo más para desconfiar del sistema instalado.
Según todo indicio racional, entre el PGOU aprobado que fue el presentado por el equipo redactor el 12 de junio de 2009, y el luego remitido a la Junta y mostrado al público, pudo haber una falsedad documental. En efecto, ambas versiones difieren ostensiblemente.
Una de esas diferencias se da en el plano 6.3.1, que afecta a esta zona. El equipo redactor, como no puede ser de otra manera, trabajó con las lindes correctas, las del Instituto Cartográfico Andaluz cuyos planos muestran la línea de hitos (mojones) perfectamente. Sin embargo, en el PGOU que se publica, aparece esa línea movida (y la casa de la Alcaldesa más los terrenos de su familia, etc.) figuran como ya siendo de Benahavís, cuando eran de Marbella y lo sabían muy bien, porque el 6 de marzo de 2009 ya les dijo la Junta que las lindes sólo podían moverse por causas justificadas, siguiendo el procedimiento adecuado, y que éstas no concurrían.
Bien, pues el 29 de julio de 2009 hubo un pleno de urgencia en el cual trataron de colarse documentos que nadie había visto, entre otros un nuevo plano 6.3.1. Quedó claro que eso no se podía hacer, que lo que se aprobaba era la versión correcta y que se había tramitado según dice la ley, es decir, la de 12 de junio preparada por el equipo redactor.
Aún así, dos días más tarde, el DVD que se vende al público con el PGOU de Marbella aparece cambiado. O sea, alguien, por la vía de hecho, cambió los papeles, incluido el que afecta a esta linde.
En contestación a Félix Romero Teniente de alcalde del PP en el Ayuntamiento de Marbella
Las personas pueden engañar por ignorancia, equivocación o maldad.
No sé cuáles han sido tus motivos para decir en público que aprobé en 1985 el deslinde entre Marbella y Benahabís que habéis aprobado ahora.
Enseñaste un acta de deslinde efectuado en la tramitación del PGOU de 1986 diciendo que yo había aprobado el deslinde cuando el acta dice textualmente que tanto Andrés Cuevas como yo nos oponíamos a dicho Plan General y pedíamos que se devolviese a los técnicos para su mejor estudio. Eso es de imbecil y perdona que te lo diga. Sí, ése acta que ya tienen los medios de comunicación. Es un truco de trilero o de mal mago.
Hice 203 alegaciones contra el PGOU de 1986 y el entonces partido gobernante PSOE no me admitió ni una. Votamos en contra y tu partido se abstuvo, votando a favor el PSOE y el GIM.
Además te digo, para aclarar tu desconocimiento te informo que un PGOU no puede establecer deslindes de términos. El del 1986 no lo hizo, lo hizo sin poder hacerlo el texto Refundido del PGOU que se aprobó en 1990.
Siento que mi vuelta a la actividad política para echarle una mano a Podemos se inicie de esta forma. Pero actitudes como la tuya me dan fuerza y energía para hacer cuanto pueda para echaros del ayuntamiento. Os lo habéis ganado a pulso.
Fdo Rafael García Conde
Miembro del Consejo Ciudadano de Podemos