El empresario y constructor Luis García-Pozuelo Asíns, uno de los arrepentidos del juicio de la trama de corrupción Gürtel que han reconocido sus delitos al comienzo de la vista oral el pasado 11 de octubre, ocupó altos cargos dentro del grupo de empresas que constituyeron la concesionaria de obras de ampliación del Hospital Costa del Sol de Marbella, adjudicataria del proyecto, por parte de la Junta de Andalucía en 2007, con 48 millones de presupuesto, y cuyos trabajos se encuentran actualmente paralizados desde hace años.
Tras una investigación periodística para conocer qué personas físicas y jurídicas están detrás de Concesionaria Costa del Sol S.A., Marbella Confidencial ha podido acreditar en el Registro Mercantil que García-Pozuelo, autor confeso de sobornos al líder de la trama Gürtel, Francisco Correa –repartidos a su vez presuntamente al extesorero del PP Luis Bárcenas– fue presidente de la hoy denominada Assignia Infraestructuras S.A., (Constructora Hispánica S.A. cuando se produjo la adjudicación). Era y es la propietaria del 50% de las acciones de la concesionaria creada para las obras hospitalarias de Marbella y en la que también participa con otro 50% Instalaciones Inabensa, una filial del grupo Abengoa.
De hecho, Assignia Infraestructuras S.A. fue la denominación que sustituyó a Constructora Hispánica S.A. en 2009, como así lo acreditan los datos registrales consultados por este medio digital. Además de presidente en Assignia Infraestructuras, García-Pozuelo también ocupó otros altos cargos como consejero y consejero delegado en distintas etapas de la mercantil, al igual que algunos de sus hijos. Todos salieron de la sociedad cuando el patriarca tuvo que venderla para poder pagar 20 millones de euros a Hacienda, que la investigaba por fraude fiscal. Tras la venta se produjo el cambio de denominación social que actualmente ostenta.
García-Pozuelo, que reconoció días atrás ante la fiscal Anticorrupción haber entregado mordidas al líder de la trama vinculada al PP para que Constructora Hispánica consiguiera adjudicaciones de obra pública ante distintas administraciones, ocupaba el cargo de presidente de la ahora Assignia Infraestructuras S.A., integrante de Concesionaria Costa del Sol S.A., cuando se produjo la adjudicación por parte de la Junta de Andalucía. De hecho, el arrepentido de Gürtel permaneció en el cargo de presidente hasta junio de 2009, cuatro meses después de que el juez Baltasar Garzón destapara la red Gürtel con las primeras detenciones.
Una Unión Temporal de Empresas para el Hospital
La Unión Temporal de Empresas (UTE) que dio origen a Concesionaria Costa del Sol S.A. se constituyó, el 25 de mayo de 2007 y a día de hoy tiene como presidente de la misma a otra sociedad: Assignia Concesiones S.L. Se trata de la antigua Hispánica Concesiones, constituida en junio de 2007 y que también estuvo en la órbita de Alfonso García-Pozuelo y sus hijos, hasta que salieron de la mercantil.
Se da la circunstancia de que en el organigrama de Assignia Infraestructuras S.A., accionista al 50% de la concesionaria de obras de ampliación del recinto hospitalario marbellí, ha figurado como consejero, entre el 27 de octubre de 2010 y el 14 de octubre de 2013 el que fuera consejero de Sanidad de la Comunidad Madrid bajo la presidencia de Esperanza Aguirre, Manuel Lamela.
Dos exaltos cargos del PP también vinculados a la concesionaria de las obras hospitalarias
Otro exalto cargo del PP, Luis Vicente Moro, asturiano y uno de los antiguos hombres fuertes del exministro de Fomento Francisco Álvarez Cascos, también aparece vinculado a Assignia Infraestructuras S.A como consejero de la misma entre el 25 de agosto de 2011 y el 14 de octubre de 2013.
Moro era el delegado del Gobierno en Ceuta cuando surgió la crisis con Marruecos en el verano de 2002, a cuenta de la invasión de la isla del Perejil por parte de soldados marroquíes, luego desalojados. Años antes, también bajo mandato de Aznar, ocupó el cargo de subdelegado del Gobierno central en Palencia.
Constructora Hispánica el nexo entre el caso Gürtel y los papeles de Bárcenas
La antigua empresa de Alfonso García-Pozuelo, Constructora Hispánica, es el nexo que conecta el llamado ‘caso Gürtel’ con el otro sumario judicial de ‘los papeles de Bárcenas’. El constructor aseguró el pasado 11 de octubre, durante el interrogatorio, que el dinero negro que entregaba a Francisco Correa iba a “organismos centrales”, sin explicar más detalles. Tampoco la fiscal le repreguntó.
El juez Pablo Ruz, antiguo instructor del ‘caso Gürtel’, consideró en su día necesario abrir una pieza separada con los ‘papeles de Bárcenas’, tras cruzar la contabilidad del contable de Correa, José Luis Izquierdo, con los documentos manuscritos del extesorero del PP que publicó El País. Se trata del procedimiento sobre la financiación irregular del Partido Popular a nivel nacional que se juzgará en junio de 2017.
La decisión del exjuez de la Audiencia Nacional se produjo, entre otros motivos, tras comprobar que García-Pozuelo aparecía entre los donantes de la llamada caja B de Génova 13, sede del PP, supuestamente los llamados “organismos centrales” del ahora arrepentido.
Concretamente, el constructor que estuvo vinculado a la concesionaria de obras del Hospital Costa del Sol aportó 162.000 euros entre 2003 y 2004 a la caja del dinero negro que presuntamente controlaba Bárcenas. Tal y como documentó la UDEF (Unidad de Delitos Económicos y Fiscales), Constructora Hispánica resultó adjudicataria de 32 proyectos, entre mayo de 2000 y marzo de 2004, por un total de 703 millones de euros. Siempre con Francisco Álvarez Cascos como ministro de Fomento.
La UDEF sostiene que Constructora Hispánica recibió entre 2001 y 2011 más de 1.000 millones de euros en contratos públicos. Cerca de la mitad de dicho montante, unos 525 millones, fueron adjudicados por cargos del PP en distintas administraciones
A principios de los años 2000 Constructora Hispánica pasó de ser una empresa sin presencia en las grandes obras públicas a recibir lotes de contratos de cuatro en cuatro del Ministerio de Fomento, para levantar tramos del AVE con presupuestos de 100 millones de euros, según recordaba eldiario.es el pasado 12 de octubre.
Luego vendrían las mordidas para el exalcalde de Pozuelo de Alarcón, marido entonces de la exministra Ana Mato, Jesús Sepúlveda, tal y como ha confesado el propio García Pozuelo, que entregaba el dinero a Correa para conseguir obras en el municipio madrileño.