Familiares de pacientes de una residencia de mayores de San Pedro Alcántara, en Marbella , han presentado una denuncia contra el establecimiento por supuestas irregularidades contra los ancianos, según ha señalado este martes el portavoz de los demandantes, Manuel Fernández.
El vocal, exDefensor del Ciudadano de San Pedro, ha destacado a Europa Press que, entre los supuestos abusos que denuncian, se encuentran los de retención ilegal a los pacientes, malos tratos, vejaciones o casos de mala alimentación y administración de los medicamentos.
“Los ancianos son los más vulnerables de la sociedad. Bastante han sufrido con el trabajo que han hecho como para que ahora estén sufriendo como consecuencia de unos desalmados que tendrían que estar en la cárcel en vez de apoyar a los mayores”, ha indicado.
Las primeras muestras de los presuntos malos tratos comenzaron a evidenciarse hace dos años, cuando cada vez eran más frecuentes “las supuestas caídas, muchos cortes, arañazos, infecciones en las heridas que no se han curado correctamente y padecen gangrena”.
También ha relatado el episodio de una paciente que falleció hace una semana al consumir fármacos de epilepsia cuando ella no padecía esta enfermedad. “Las pastillas de otro anciano se la estaban administrando a ella”, ha indicado Fernández, que ha atribuido el error al “personal inadecuado” del centro.
“Algunas pastillas se administran mojadas porque están manipuladas por personal no cualificado”, ha agregado. Fernández ha relatado el caso de un familiar cercano, que reside en el centro desde verano de 2014, y que, según ha indicado, fue víctima de una retención ilegal al permanecer 20 días “confinado” en una habitación con cerraduras con códigos secretos de la que “no salen ni a tomar el sol”. “Allí les cambian, allí pasan el día, allí duermen la siesta. El olor es insoportable a orines y heces”, ha apuntado.
El portavoz de los familiares afectados ha calculado que la residencia cuenta con cerca de 160 pacientes y una alta demanda ya que, ha indicado, cuando fallece un anciano “entran cuatro”. “Está a tope”, ha sintetizado.
Fernández ha asegurado que familiares de los pacientes han elevado quejas a la Junta de Andalucía, con la que la residencia tiene concertadas algunas plazas, pero ha indicado que la Administración regional “no toma conciencia” de los supuestos abusos.
“Yo presenté en 2014 una queja a la Delegación de Salud y Asuntos Sociales la Junta en Málaga cuando Daniel Pérez era el delegado. Me contestaron que después de una inspección no habían encontrado nada. ¿Cómo van a encontrar algo cuando ellos avisan antes y dicen ‘mira, que vamos para allá’?”, ha concluido Fernández.