“No queremos ser más que nadie, pero tampoco menos que nadie”. La frase, pronunciada en el pasado cuando Javier Arenas presidía el PP andaluz y confrontaba con Chaves, Griñán y Zapatero, vuelve a repetirse ahora que los conservadores gobiernan en Andalucía. El encargado de repetir tales palabras este martes ha sido el consejero de Presidencia, Elías Bendodo, a la hora de anunciar que el presidente Moreno Bonilla va a enviar “en las próximas horas”, una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez,en la que le reclama una “mesa bilateral” equiparable a la que se va a celebrar con Cataluña.
El Gobierno andaluz decentroderecha, conformado por Partido Popular y Ciudadanos, asegura que va a estar “muy atento mañana” ante el encuentro entre el presidente catalán, Pere Aragonès, y Sánchez, “porque Andalucía quiere otra mesa bilateral ni mejor ni peor” que la conformada con Cataluña, “para hablar de infraestructuras y empleo”, ha precisado el también portavoz de la Junta.
Los gobernantes andaluces no quieren que la mesa de mañana “sirva de coartada” para las “desigualdades” entre territorios, así como para que Andalucía “pierda dinero a espuertas” por el actual modelo de financiación autonómica que sigue defendiendo la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, blanco de las críticas de PP y Cs. Todo ello porque cuando ella era consejera del ramo –del Gobierno andaluz– se posicionó en contra de lo que ahora desde Moncloa defiende. De hecho, el PP, al contrario que Cs, se sumó a última hora a los acuerdos parlamentarios sobre los que ahora puede reclamarle al Estado, representado por Sánchez.