El presidente de la Diputación de Málaga, Elías Bendodo (centro) flanqueado por los dos diputados de Cs en la institución, Gonzalo Sichard y Teresa Pardo, este jueves. FOTO/ EP
El presidente de la Diputación de Málaga, Elías Bendodo, y el portavoz de Ciudadanos en la institución, Gonzalo Sichar, han realizado este jueves balance del segundo año de mandato, justo el día en que se cumplen dos años de la investidura. Un tiempo en el que ambos han destacado la “buena sintonía” no sólo política sino personal, abogando el máximo responsable provincial por “exportar” el acuerdo entre ambas formaciones a los municipios malagueños “no para cambiar gobiernos sino para desbloquear problemas”.
Es más, Bendodo ha incidido en que este modelo es “necesario y urgente” en la Junta de Andalucía. Así, ha subrayado que el acuerdo entre PP y Cs, “que no somos lo mismo”, va a ser “el que liderará” la Comunidad Autónoma “como muy tarde a partir de marzo de 2019”.
“Estamos condenados a entendernos”, ha sostenido en rueda de prensa junto a Sichar y la diputada de la formación naranja, Teresa Pardo. Para Bendodo, su partido tiene “capacidad de gestión demostrada” mientras que Ciudadanos tiene ya experiencia para ir “de la mano” y que se produzca un cambio de gobierno en Andalucía.
“Somos la única comunidad autónoma sin alternancia política, que es necesaria para hablar de madurez democrática. Después de 30 años, si estuviéramos los primeros en educación o sanidad no 30, sino 60 años, pero estamos los últimos porque el PSOE no gestiona bien”, ha recalcado.
En su intervención, el presidente de la Diputación malagueña ha hecho hincapié en el “alto grado de consenso” con Cs, con un acuerdo de investidura “vivo y reforzado continuamente con nuevas propuestas”. “La clave es negociar con la mano tendida y nuestra voluntad es que haya acuerdos por el bien de la provincia”, ha apostillado.
Aunque Bendodo no ha querido cifrar el grado de cumplimiento del acuerdo, asegurando que es “muy avanzado”, Sichar sí ha dicho que ya ha salido adelante alrededor del 80 por ciento del mismo, con excepciones como el reglamento de la Diputación, que se está ultimando; el de uso de vehículos de la institución provincial; el plan piloto de mancomunización de servicios o la fusión de Ciedes y Madeca. Sobre esto último ha dicho que hay dificultades jurídicas aunque “ha habido cambios y estaremos con la lupa puesta en Madeca”.
Para el presidente de la Diputación, “lo que funciona no hay que cambiarlo sino reforzarlo y exportarlo” a la provincia. En este sentido, ha reiterado que no habla de cambios de gobierno sino de “extender la buena sintonía entre ambos para desbloquear problemas y repetir lo que hacemos en esta institución en algunos ayuntamientos”.
Tras destacar que ya no es tiempo de mayorías absolutas sino de “altos grados de consenso”, Bendodo se ha mostrado “satisfecho” aunque ha admitido que se puede “llegar más lejos”. Principalmente ha destacado los avances en transparencia y Gobierno Abierto en la institución.
De cara al futuro, Sichar ha dicho que la sintonía personal beneficia la estabilidad política y ha asegurado que “mientras sigan los equipos sin variaciones no hay ninguna pega a la estabilidad”, afirmando Bendodo que “no habrá cambios”.
Supresión de diputaciones
Uno de los puntos donde PP y Cs más difieren es precisamente en la existencia de las diputaciones, una institución imprescindible para los primeros y que para la formación naranja deberían suprimirse. En este sentido, Sichar sigue manteniendo, a pesar de estos dos años de trabajo, que los servicios que presta sí son necesarios “pero no toda la estructura”, citando los 31 diputados provinciales, los cargos de confianza, etcétera.
“Sí, pensamos que hay que suprimirlas. Hay que hacer reformas profundas y en la Constitución se habla de comunidades y provincias, no de diputaciones”, ha dicho el portavoz de Cs, quien ha apostado por la fusión de pequeños municipios para que se hagan “más fuertes” y deleguen competencias en las delegaciones territoriales de la Junta de Andalucía.
En un punto totalmente opuesto se ha situado Bendodo, quien ha defendido el papel de las diputaciones y ha recordado que en el primer Estatuto de Autonomía de Andalucía la “administración periférica” de la Junta “no existía”; es más, ha considerado que estas no tienen capacidad ejecutiva y “son cargos políticos”.
Balance
Durante la intervención de ambos dirigentes políticos, han destacado algunos de las acciones realizadas en estos 24 meses. Así, Bendodo ha incidido en los planes de inversión de la institución, con 104 millones de euros para los 103 municipios, ofreciendo así mejores servicios. También ha resaltado el reciente acuerdo entre las cinco fuerzas políticas de la Corporación para distribuir 44 millones del remanente de tesorería, 27 de los cuales se destinarán al Plan de Inversiones Financieramente Sostenibles (PIFS).
En estos dos años han salido adelante proyectos como el Hospital del Guadalhorce, el Caminito del Rey o la Senda Litoral, con la colaboración de todas las administraciones. Además, se ha referido a la transferencia de 149 millones a los municipios y en la inversión de 145 millones –115 en transferencias directas– en dos años a infraestructuras y equipamientos.
Bendodo ha recalcado el Plan de Primera Oportunidad, que ha permitido subvencionar a 57 empresas y emplear a 78 titulados con una inversión de 830.000 euros. El presupuesto para este año supera el millón de euros y “queremos potenciarlo”.
La Noria, el gasto social de más de 91 millones en el presupuesto de este ejercicio, las acciones de Turismo Costa del Sol y Sabor a Málaga, la próxima puesta en marcha de la marca Málaga de Moda para mejorar el posicionamiento de este sector y la plantación de un millón de árboles hasta 2020 para hacer una provincia “más verde y mucho más amable” son otras de las intervenciones en las que ha hecho hincapié el presidente de la Diputación.
Sichar, por su parte, ha destacado el aumento de la transparencia, el ahorro de cuatro millones en el conjunto del mandato por la bajada de sueldos de diputados, del número de cargos de confianza y también de los topes salariales a los directivos, de manera que el presidente de la Diputación, “que es el que más responsabilidad tiene”, es el que más cobra.
También ha aludido a la creación del programa Málaga Bilingüe; la necesidad de que las asociaciones y ONG justifiquen las ayudas percibidas por la Diputación; la eliminación del “privilegio” a los diputados para tener entradas para espectáculos taurinos; la futura pasarela a pie entre Málaga y Torremolinos; el desbloqueo del Hospital del Guadalhorce y el de Estepona, entre otras, son acciones desarrolladas en este tiempo.
La reducción de la deuda es otro de los puntos importantes del acuerdo de investidura. De hecho, han reiterado tanto Bendodo como Sichar que a finales de 2018 será de cero euros, frente a los alrededor de 30 millones actuales y los 251 millones de hace seis años.
