El presidente de la Diputación de Málaga, Elías Bendodo (PP), quiere que la institución sea en este mandato un ejemplo de acuerdos entre todas las formaciones representadas. Su próximo reto es lograr “el máximo consenso” posible con PSOE, Ciudadanos (C’s), IU-Málaga para la Gente y Málaga Ahora para la elaboración del presupuesto de 2016, que tendrá más partidas para políticas sociales.
“Mis esfuerzos van a estar en que el presupuesto tenga el mayor consenso de todos los grupos”, ha recalcado, y ha añadido, en una entrevista concedida a Europa Press, que se quiere aumentar la dotación en materia social, además de incidir en las inversiones productivas para “generar empleo y calidad de vida y servicios a la ciudadanía”.
Si este año el presupuesto consolidado asciende a 280 millones de euros, con un aumento de la inversión respecto al anterior ejercicio de un 10 por ciento, hasta alcanzar los 45,4 millones de euros, las cuentas de 2016 serán “similares” porque “las transferencias del Estado no varían mucho”.
Como líneas principales estarán el Plan de Asistencia a Municipios, la antigua Concertación, y más partidas para políticas sociales, ha manifestado; incidiendo en la importancia del Área de Desarrollo Económico y Productivo, para llevar a cabo más inversiones que generen “empleo y calidad de vida”; además de que la Diputación sea “la gran prestadora de servicios para facilitar la vida a los cerca de dos millones de malagueños que viven en la provincia”.
Otra de las obsesiones de Bendodo es dejar la deuda de la institución a cero en estos cuatro años. Ya en el pasado mandato 2011-2015 se redujo en más de un 66 por ciento, pasando de 300 a 98 millones. “Es objetivo es acabar con la deuda en 2019, pero si se puede adelantar, mucho mejor”, ha apostillado.
PACTAR CON TODOS
Sobre el pacto de investidura con Ciudadanos, que ha permitido a Bendodo renovar la Presidencia de la Diputación, ha señalado que la formación naranja será la primera puerta a la que llamarán “siempre” para “desbloquear proyectos importantes para Málaga”. Sin embargo, esto no significa, ha ahondado, que descarten hablar con otros partidos.
“El PP tiene la obligación y la necesidad de cambiar el chip y aquí en la Diputación ya lo hemos hecho; tenemos que tener la capacidad de pactar con todos, no sólo con Ciudadanos, y lo estamos demostrando”, ha expuesto.
El también líder de los ‘populares’ malagueños ha sostenido que su “anhelo” es que los grandes proyectos de futuro para la Diputación estén consensuados entre todos “y que cada uno aporte lo mejor que tiene para un modelo de provincia”.
“Nosotros, el PP, somos buenos en muchas cuestiones, pero otros son mejores en otras cosas, y de la unión de todos tiene que salir un gran plan para dibujar una provincia de futuro, en el horizonte de 2025, y en eso hay que estar y tener altura de miras”, ha defendido Bendodo.
En este sentido, ha dicho que ve a todos los portavoces de la oposición con “una muy buena actitud, predisposición y con una visión clara de lo que quieren para la provincia”. “Son ingredientes necesarios para sembrar el consenso en el futuro”, ha aseverado, añadiendo que gobernar “es ceder, pactar y consensuar”.
También ha indicado que los reajustes acordados en el pacto de investidura con Ciudadanos se han llevado ya a cabo “y se está cumpliendo el acuerdo a rajatabla; hay una mesa permanente”.