Un juez ha acordado conceder la libertad condicional al principal condenado en el caso ‘Malaya’, contra la corrupción en la localidad malagueña de Marbella, Juan Antonio Roca, que pasó casi 12 años en prisión y ha estado prácticamente un año en tercer grado.
Así lo han dado a conocer a Europa Press fuentes penitenciarias, quienes han apuntado que las tres cuartas partes de la condena se cumplieron en 2018, aunque esta no quedará extinguida hasta el año 2023.
El juzgado de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional acordó a finales del mes de enero de 2018 la progresión a tercer grado de Roca, “en la modalidad del artículo 86 TL”, el cual recoge la posibilidad de poner a los internos el control fuera del centro con medios telemáticos.
Desde marzo del pasado año, Roca se encontraba en régimen de semilibertad y contaba con un dispositivo de control telemático, por lo que solo tenía que ir al Centro de Inserción Social (CIS) de Málaga cuando era requerido.
En su resolución, el magistrado de la Audiencia Nacional indicaba que el interno iba a compatibilizar la labor profesional con la de voluntariado, en concreto acudiendo al centro Nuestra Señora de la Merced, dependiente de Cáritas, que se encarga de ayuda a la reinserción de internos y exreclusos.
En aquel momento, el juez consideró que con esto Roca daba “un paso más”, ya que “de forma voluntaria y sin retribución alguna se ha ofrecido a colaborar” con dicha ONG. Además, el magistrado tuvo en cuenta factores, como que una actividad “positiva” para abonar las responsabilidades económicas a las que ha sido condenado, y la conducta penitenciaria “excelente”.