La Policía Local de Marbella ha desmantelado en San Pedro Alcántara un club de una asociación de fumadoresen el que se vendía y consumía droga. En esta operación policial, conocida este jueves, efectivos del citado cuerpo de seguridad detuvieron a dos individuos por un presunto delito contra la salud pública. En el caso de uno de estos dos hombres también se le imputa un delito contra la Administración de Justicia. Pesaba sobre él una orden de búsqueda, detención y personación emitida por un juez de instrucción de Ibiza Los dos arrestados son de origen británico (de 35 y 29 años) no colaboraron con los agentes y únicamente negaron ser los propietarios del club.
En el caso del inglés de 35 años, nacido en Rochford (Reino Unido) y residente en Mijas, las consultas de la Policía Local detectaron un requerimiento de búsqueda, detención y personación emitido por el Juzgado de Instrucción número 3 de Ibiza por un delito de daños. En el registro policial hallaron también un total de 2.100 euros, a lo que hay que sumar los más de 500 euros que portaban entre los dos individuos.
Al margen de los detenidos mencionados se han intervenido más de 2.600 euros, distintos tipos de droga e instrumentos para su pesaje y manipulación, según ha informado el Ayuntamiento de Marbella por medio de una nota de prensa. Los hechos tuvieron lugar la pasada semana, cuando una unidad policial de paisano, que previamente había tenido conocimiento de la supuesta actividad de dispensa y venta de sustancias en el citado establecimiento, comprobó como una persona llamaba a la puerta solicitando marihuana.
Los agentes accedieron entonces al interior del local. Fue entonces cuando se identificaron como policías y procedieron a la inspección de este local de San Pedro. En el interior descubrieron, detrás de la barra, numerosos botes de cristal y bolsas de plásticos que contenían cogollos de hierba de lo que parecía ser marihuana y piedras marrones de resina de lo que parecía ser hachís, clasificadas según su variedad.
De forma paralela se intervinieron más de una treintena de cigarrillos que contenían derivados de cannabis, nueve envoltorios con lo que parecía ser cocaína y una bolsa con hongos, así como dos básculas de precisión, una prensa hidráulica y distintos instrumentos para la manipulación y envasado de las sustancias. El peso de la marihuana descubierta en el establecimiento superaba los 1.000 gramos y en el caso del hachís alcanzaba los 311, mientras que la cocaína intervenida se situaba en 9,6 gramos, los cigarrillos casi 40 y las setas más de 33 gramos.