Boris Mazo, antiguo alto cargo del Ministerio de Cultura de Rusia detenido la pasada semana en la ‘operación Hammer’ contra el blanqueo de capitales, en la que también cayó Antonio Zarco, el abogado de confianza del alcalde de Estepona, José María García Urbano, ha solicitado asilo político en Austria porque teme que los cargos presentados en su contra en su país de origen por el robo de cientos de millones de rublos procedentes de fondos públicos sean “políticamente motivados”, según ha informado este viernes su letrado defensor.
“Confirmo que (Boris) Mazo ha solicitado asilo político en Austria. Cree que los cargos penales en su contra en Rusia están políticamente motivados”, señaló su letrado Viacheslav Musiyaka a la agencia Interfax, información de la que se hace eco la agencia Efe española desde su delegación en Moscú.
Se trata del exdirector del Departamento de Propiedades y Política de Inversión del Ministerio de Cultura, Boris Mazo, quien fue detenido a principios de mes en Austria a raíz de una orden europea de detención y entrega dictada por el Juzgado de Instrucción número 2 de Marbella.
A la vez la exesposa y el hijo de Mazo, ambos de nacionalidad rusa, fueron detenidos en Marbella junto al abogado Antonio Zarco durante la ‘operación Hammer’ como presuntos autores de un delito de blanqueo de capitales en la compra de un chalet de lujo por el que se pagó 4 millones de euros con dinero presuntamente procedente de delitos fiscales y de corrupción efectuados en Rusia.
En los últimos días el PSOE ha intensificado su presión sobre el alcalde de Estepona, el ‘popular’ José María García Urbano, para que ofrezca explicaciones tras conocerse sus vinculaciones societarias con Zarco, desveladas por Marbella Confidencial en los últimos años. El regidor del PP llegó a negar tales nexos con Zarco, a pesar de que están acreditados en el Registro Mercantil.
Tribunal de Viena
Mazo fue puesto en libertad el pasado día 8 por un tribunal de Viena bajo una fianza de 25.000 euros con la prohibición de salir del país. También su exmujer y su hijo en Marbella, pero tienen prohibido igualmente abandonar España y deben presentarse ante los tribunales dos veces al mes, de acuerdo con la agencia TASS.
Las pesquisas dieron inicio en julio del año pasado cuando la Policía recibió una petición de información por parte de las autoridades rusas en relación con un supuesto fraude fiscal a gran escala cometido en Rusia, entre otros, por el exalto funcionario del Ministerio de Cultura, que se encontraría residiendo en la Costa del Sol española.
Las autoridades rusas ya emitieron una orden internacional de detención para fines de extradición sobre este exalto funcionario, que habría estado supuestamente involucrado en dos casos de corrupción en su país aprovechándose de su condición de alto responsable del Ministerio de Cultura.
En uno de los procedimientos judiciales en Rusia se le imputa la malversación en connivencia con otras personas -otro acusado es el exviceministro de Cultura Grigori Pirumov-, de unos 7,2 millones de dólares de fondos públicos que habrían sido asignados para la reconstrucción del Museo del Hermitage de San Petersburgo.
En otro caso estas personas estarían implicadas en la supuesta malversación de 2,6 millones de dólares que debían haber sido destinados a la reconstrucción de monumentos del patrimonio arquitectónico en distintas regiones rusas, hechos por los que cumplieron 18 meses de prisión preventiva.
Mazo abandonó Rusia después de salir de prisión y se refugió supuestamente en su mansión en la Costa del Sol.