Imagen de la fachada del restaurante Lateral de Marbella, en la plaza de Los Naranjos. FOTO/ MC
El grupo de restaurantes Lateral ha desembarcado en Marbella y lo ha hecho a lo grande, en plena plaza de Los Naranjos, centro neurálgico de la ciudad, concretamente en el edificio histórico de la antigua Casa del Corregidor.
Se trata de un espacio innovador y sorprendente firmado por las interioristas Alicia Martín y Alba Hurlé, de Cousi. El local tiene tres plantas: Una y media de uso comercial y el resto residencial, con una fachada sencilla de color blanco y ventanas verde grisáceo que se integran plenamente en el entorno.
La oferta gastronómica de Lateral Naranjos se caracteriza por una cocina non-stop (abierta todo el día)basada en una cuidada selección de pinchos y opciones para compartir, con elaboraciones diarias en sus cocinas.
El restaurante marbellí ofrece platos especiales conocidos como ‘Experiencias Lateral’: Pizza de gambas cristal, ensalada de pimientos asados y huevo con puntilla; Fritos de rosada con ali oli de lima’y Taquitos de tartar de salchichón de Ronda.
El resto de la carta, “como parte del ADN de Lateral, es común en todos los restaurantes, haciendo cambios puntuales en cada temporada”, afirman sus responsables.
Además de su gastronomía, Lateral Naranjos destaca por su ambiente cálido y acogedor, que se adecúa a los diferentes momentos del día ofreciendo muchas más experiencias para disfrutar en compañía, en su interior o terraza.
En el capítulo de los llamados “desayunos variados y saludables” destacan las tosas de huevos camperos revueltos, rúcula y aguacate, o su de pavo asado, rúcula y queso crema.
No falta el llamado ‘afterwork’, típica copa a la salida del trabajo, “con precios especiales en bebidas durante la semana”. Vermut a cualquier hora, menús especiales para grupos, y combinados y coctelería para divertirse entre amigos, son algunas de las propuestas con las que disfrutar en Lateral.
Lateral, muy comprometido con el arte, expone el trabajo del reconocido artista José G. Onieva famoso entre otras cosas, por sus esculturas de acero y bronce de entre 3 y 6 metros de altura. Su obra está muy relacionada con la naturaleza, y así lo ha reflejado en las diferentes esculturas que ha realizado para el restaurante.
