Juan Espadas tiene un pasado como gobernante del PSOE en Andalucía y es precisamente esa etapa la que se convierte para él en un lastre de presente y futuro. No se trata, por tanto, de un candidato de borrón y cuenta nueva para presidir la Junta, sino de alguien a quien algunas promesas incumplidas persiguen, circunstancia que es aprovechada por el actual Gobierno de Partido Popular y Ciudadanos.
Este martes Espadas protagonizaba un acto para presentar la llamada “Ponencia Marco” del 14 Congreso Regional del PSOE-A, que se celebrará en noviembre en la localidad malagueña de Torremolinos. La propuesta “estrella” de dicho documento, a modo de promesa si los socialistas vuelven al poder, es “convertir en derecho la primera oportunidad laboral de los jóvenes” y establecer una legislación que sería pionera en esta materia.
Lo cierto es que el principal rival del presidente Juanma Moreno no ha precisado muy bien cómo hará para garantizar ese “derecho” de los jóvenes, más allá de asegurar que pondrá en marcha “una alianza pilotada, promovida con las empresas, para buscar esa primera oportunidad laboral, construyendo una estrategia conjunta”. Todo ello en función de la formación que tenga cada solicitante: “el reto del próximo gobierno socialista tiene que ser la juventud”, ha anunciado grandilocuente.
Poco ha tardado el portavoz de la Junta, Elías Bendodo, a su vez consejero de Presidencia, en devolver a Espadas al pasado. Lo ha hecho al recordarle que fue él quien impulsó en 2009 la Ley de Derecho a la Vivienda (aprobada en 2010 en el Parlamento). Un texto que, entre otras novedades, iba a permitir al ciudadano exigir en los tribunales una vivienda digna “y no se ha cumplido”.
El también portavoz del Ejecutivo de coalición ha aconsejado al secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, “finura y rigurosidad” en sus propuestas a la ciudadanía porque los socialistas, durante todos los años que han estado en la Junta, han intentado siempre “vender la moto” con propuestas que nunca se hacían realidad.
Para tratar de profundizar en los argumentos esbozados por Bendodo acerca del “fracaso” que, a su juicio, supuso la citada ley impulsada por Espadas, Vozpópuli se ha puesto en contacto con quien fuera ponente del PP cuando se aprobó en el Parlamento, Alicia Martínez, actual secretaria general de Vivienda en la Consejería de Fomento que dirige la consejera Marifrán Carazo.
“Cuando se aprobó aquella ley –recuerda Martínez– “estábamos en plena crisis inmobiliaria, que empezó en el 2008, y no se contempla ningún resorte para hacer frente a la crisis”. Esta experta en Urbanismo recalca que por aquel entonces “empezaban los desahucios y esta ley no trabajó en absoluto esta problemática”. Cree que el PSOE “se tapó los ojos” durante aquella situación de “crisis inmobiliaria” y protagonizó una “huida hacia adelante” con la Ley del Derecho a la Vivienda.