Dos exresponsables del Xerez Club Deportivo acusado por un delito de blanqueo de capitales en una pieza separada del caso ‘Malaya’, han asegurado que desconocían si el principal condenado por dicho caso de corrupción en Marbella, Juan Antonio Roca, estaba detrás o tenía relación con las operaciones de compraventa del equipo de fútbol.
La Sección Octava de la Audiencia de Málaga ha juzgado al empresario y expresidente del Xerez, José María Gil Silgado, y al que fuera accionista mayoritario del club Luis Oliver, para los que la Fiscalía Anticorrupción ha mantenido este miércoles la petición de dos años y nueve meses de prisión y multa de 2,5 millones de euros, a cada uno.
El fiscal sostiene que Roca se fijó en el Xerez CD para invertir, lo que supuestamente “se llevó a cabo en distintas operaciones” hasta adquirir el 50 por ciento del club y los derechos televisivos, a través de dos sociedades, participadas por otras mercantiles, participando Gil Silgado “de forma opaca, con la finalidad de ocultar la procedencia de los fondos utilizados”.
Según el ministerio público, los dos procesados sabían que Roca era “el verdadero socio del negocio, siendo plenamente conscientes de sus problemas con la justicia”, aunque se prestaron “voluntariamente a colaborar en la ocultación de fondos ilícitos”.
Así, Gil Silgado, que sólo ha contestado a las preguntas de su defensa, ha declarado que compró acciones en 2002 y vendió en 2004 con “el único objetivo de obtener plusvalía” y ha manifestado ante el tribunal que lo hizo “con recursos propios y de mis empresas”.
Sobre Roca, ha asegurado que “debido a la opacidad en que se movía este señor, desconocía que estaba detrás de una de las empresas” que participó en las operaciones desarrolladas en esas fechas en torno al club deportivo.
Además, ha indicado que él jamás ha estado relacionado con delitos de prevaricación, malversación o urbanísticos por su actividad profesional en Marbella y ha aseverado que a la fecha de la operación de la compra del Xerez no sabía que Roca estaba relacionado con delitos graves.
El otro acusado ha sostenido que tenía “urgencia” por vender el club porque le habían obligado a hacer un aumento de capital, reiterando en varias ocasiones que él era simplemente “un industrial de 35 años en ese momento, que vendía grúas”, frente a otras personas de relevancia entonces como el exalcalde y expresidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil, que era “muy importante”.
Ha declarado que éste primero le puso en contacto con Roca y luego conoció a Gil Silgado, asegurando que el empresario fue el primero que tuvo interés en la compra. “Con quien hablé y negocié fue con Gil Silgado”, ha asegurado, aunque ha reconocido que en una cena en la que también estuvo Roca “me pareció que también tenía interés”.
Ha dicho que no sabe si Roca era socio de Gil Silgado y que no pensaba que el principal condenado en el caso ‘Malaya’ estaba detrás de los pagos o de la operación, asegurando, igualmente, desconocer si éste había sido detenido en ese momento por el caso Saqueo. “A mí Roca me parecía un señor estupendo”, ha indicado.
La forma de pago de las acciones incluía la cesión de algunas fincas, una manera que no le sorprendió, al ser en ese momento “normal entre constructores los pagos así”. “Yo era más inocente que una piruleta en aquella época”, ha respondido en relación con quién diseñó y elaboró los contratos de la operación.
El fiscal sostiene que el expresidente del club actuaba siempre a través de alguna de sus empresas, “todas carentes de estructuras tanto humana como de medios materiales”. Así, señala que el otro acusado, el que fuera principal accionista, conocía al exalcalde marbellí Jesús Gil, al que “había comunicado en reiteradas ocasiones su intención de vender el club”.
Fue el exregidor, según la acusación pública, el que informó a Roca de esas intenciones de vender el club, el cual ya había realizado inversiones en distintos ámbitos económicos, como el hotelero, ganadero, agrícola e inmobiliario, “utilizando fondos que había obtenido de la actividad delictiva”, y decidió ampliar “su ámbito de negocio”, invirtiendo en ese momento en el sector deportivo.
Por su parte, las defensas han cuestionado algunos informes y documentos que están en esta causa y una de ellas ha planteado la nulidad de varios autos del procedimiento, en los que se acordó sacar del proceso a Roca y a otros condenados en el caso ‘Malaya’, al haber sido juzgados por este tema en dicha causa. Para este letrado, ha habido un error y en ‘Malaya’ tampoco fueron juzgados.