La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad, investiga la muerte, este martes, de una profesora del Instituto Guadalpín de Marbella, de 43 años de edad, a quien se le inyectó la vacuna de AstraZeneca a principios de este mes de marzo.
La información oficial que ha trascendido hasta ahora, desde el Ministerio de Sanidad, es que esta mujer murió a causa de un ictus isquémico con transformación hemorrágica, que ha provocado su fallecimiento. Se investigan también otros dos casos de trombosis en España que no desembocaron en fallecimientos.
Presentaba síntomas que los médicos achacaron a efectos secundarios de la vacuna. La paciente fue ingresada el fin de semana por un infarto cerebral y este lunes fue sometida a una intervención quirúrgica, sin que se pudiera hacer nada por su vida. Se está a la espera de la autopsia para conocer más detalles de lo ocurrido.
El proceso de vacunación contra la COVID-19 con la vacuna de AstraZeneca ha quedado suspendido durante, al menos, las dos próximas semanas, a la espera de los resultados que arrojen los estudios que están realizando la EMA, la AEMPS y el resto de agencias.
La decisión del Ministerio de Sanidad fue comunicada a las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) celebrado este lunes, tras la detección este fin de semana de nuevos eventos trombóticos en personas a las que se ha administrado esta vacuna.
Francia y Alemania, también han decidido paralizar temporalmente su vacunación con AstraZeneca, a pesar del consejo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de los reguladores de la UE y Reino Unido, que han aconsejado hasta ahora mantener la vacunación porque “los beneficios superan los riesgos” y aduciendo que por el momento no se ha evidenciado un vínculo entre la vacunación y estas reacciones.
Sanidad ha explicado que se trata de tres casos (en España) de eventos trombóticos que por sí mismos, “aunque infrecuentes, pueden ocurrir en la población general”. Sin embargo, apuntan desde el Ministerio, “los tres casos cuentan con la particularidad de que los eventos trombóticos se han asociado a una disminución del número de plaquetas en sangre”. Este hecho puede sugerir–acotan– “una activación anormal del sistema de la coagulación que se asociaría a esta formación de coágulos en localizaciones que no son las más habituales”, argumentan los expertos españoles.