La compañía ferroviaria pública francesa SNCF y el consorcio integrado por Air Nostrum y Trenitalia han sido seleccionados como los dos primeros operadores que entrarán a competir con Renfe para ofrecer viajes en AVE baratos cuando en diciembre de 2020 este mercado se abra a la competencia.
Se trata de las dos empresas a las que Adif ha adjudicado, en reunión extraordinaria de su consejo de administración, la capacidad para operar en el AVE que ha sacado a concurso en el marco del proceso de liberalización del ferrocarril.
En un comunicado, Ilsa ha informado de que ofrecerá 32 servicios diarios en la ruta Madrid-Barcelona (16 por sentido), 8 en la ruta Madrid-Valencia, 7 entre Madrid y Málaga y Sevilla, y entre 3 y 4 frecuencias diarias el enlace Madrid-Alicante, que se incrementarán en las semanas centrales de verano.
Operará las rutas con el tren Frecciarossa 1000, que tiene una velocidad comercial máxima de 360 kilómetros hora, tecnologías sostenibles y diseño aerodinámico.
De su lado, la SNCF, a través de su filial española Rielsfera, se ha hecho con el denominado paquete ‘C’ de servicios, el que comprende cinco circulaciones al día por estas tres mismas líneas.
De su lado, Renfe, tal como se esperaba, se ha quedado con el mayor paquete de servicios ferroviarios de los tres en liza, el paquete ‘A’, que contempla un máximo de un centenar de frecuencias diarias en el conjunto de los tres corredores, dado que, por el momento, es el único operador con capacidad para prestarlo.
El modelo de apertura del ferrocarril a la competencia diseñado por la compañía que preside Isabel Pardo de Vera supone que la capacidad ofertada permita elevar en hasta un 65% las frecuencias de trenes que actualmente se prestan en estas líneas.
Una vez que Adif ha adjudicado estos ‘paquetes’ de servicios en la red AVE, el siguiente paso, previsto ya para los primeros meses de 2020, será firmar con ellos los correspondientes acuerdos marco. De esta forma, las empresas adjudicatarias cuentan con un plazo de casi un año para ir diseñando y preparando sus planes de negocio y poder así empezar a dar servicio de transporte de viajeros en tren a partir del 14 de diciembre de 2020, cuando este sector se liberaliza en toda la UE.
El resto de compañías que han competido para posicionarse en el mercado del AVE y que, por el momento, no logran entrar son la firma andaluza Eco Rail, el grupo formado por Talgo, Globalia y el fondo Trilantic, y el conformado por las compañías de concesiones Globalvía y Moventia.
Con la apertura a la competencia en el transporte en tren se pretende sacar el máximo partido y rentabilizar la red AVE española, en cuya construcción se han invertido 51.000 millones de euros, y que, con sus 3.200 kilómetros de longitud, es la segunda mayor del mundo por detrás de la de China y la más larga de Europa.
Asimismo, se pretende atraer a un mayor número de viajeros hacia el ferrocarril, que además es el medio de transporte más sostenible, y abaratar el precio de los billetes de tren AVE.