Lourdes García ha tomado este viernes posesión como presidenta de la Audiencia de Málaga. Es la primera vez que una mujer ocupa este puesto y, en su discurso, la magistrada ha dicho que “no basta con haber accedido al mundo del trabajo, creo que es importante que nos demos cuenta de que también nosotras, las mujeres, podemos y debemos asumir puestos de la máxima responsabilidad”.
Así, en declaraciones a los periodistas antes del inicio del acto, la magistrada ha indicado que “socialmente tiene su importancia que las mujeres vayamos llegando a cargos de responsabilidad dentro del ámbito judicial, que ya hay en otros sitios y en Málaga no se había producido”.
“Con perspectiva de género, debemos contribuir a nuestra especial percepción de la realidad, a la mejora, evolución y renovación de los modelos caducos y, en concreto, en el ámbito judicial, a trabajar en pos de una Administración de Justicia óptima y moderna”, ha señalado en su intervención.
Asimismo, ha hecho un repaso de sus propuestas presentadas con su candidatura, en las que se pondrá a trabajar ya; y ha señalado que será “muy sensible” al tema de la violencia contra la mujer, problemática que ha tratado en varias instancias, abogando por trabajar sobre ello, siguiendo las pautas del Observatorio de Violencia de Género y del Instituto de la Mujer.
También se ha referido a los retos que debe afrontar la Audiencia malagueña, en aspectos como el expediente digital, los medios tecnológicos, mediación o agilización de macrojuicios para que “se puedan celebrar en tiempos razonables”.
En cuanto a los medios materiales, ha dicho a los periodistas que “habrá que ir viendo las necesidades” y llevar a cabo las medidas y propuestas que ya existen para dotar de más plazas a los partidos judiciales “más colapsados”.
Sobre las críticas por una supuesta incompatibilidad al ser su marido presidente de la Audiencia de Granada y coincidir ambos en la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), García ha indicado que el tema está “‘sub judice’, lo resolverán los tribunales y tendremos que sujetarnos a lo que ellos consideren una vez que se tramite el recurso que parece ser que se ha interpuesto”.
No obstante, la magistrada ha dicho sentirse “perfectamente legitimada” para ser presidenta de la Audiencia, recordando que presentó su solicitud “reuniendo los requisitos y el nombramiento se ha producido en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) con toda la legalidad y lealtad posible”.
Ya en su discurso, ha señalado que quiere poner su “granito de arena como mujer que ha dado un paso adelante venciendo los miedos y la inseguridad que el cargo al que he optado me generaban, con el fin de participar en dicho proceso de selección con independencia del resultado, en buena lid y con plena honestidad junto con mis compañeros”.
“Nada he ocultado y nuestras circunstancias personales son sobradamente conocidas por la Sala de Gobierno”, ha indicado, apuntando que, “no obstante, ante las dudas suscitadas”, ha presentado un escrito al TSJA “donde expongo mi interés e intención de evitar situaciones de coincidencia en Sala de Gobierno hasta que el Tribunal Supremo interprete el precepto cuestionado”.
Al respecto, el presidente del TSJA, Lorenzo del Río, que ha presidido el acto de toma de posesión, ha asegurado a los periodistas que “hay que dejar que en su momento los tribunales hagan la interpretación que proceda”, aunque ha destacado que “ahora mismo es una persona que honestamente ha pedido una plaza, que legítimamente la tiene y va a estar a lo que diga luego el Consejo y el Supremo”.
Así, ha indicado que se trata de “un acto de toma de posesión de un nombramiento absolutamente legal, legítimo, que se presume válido, por eso estamos ejecutando lo que dice el Boletín Oficial del Estado, en un acto que es debido”, por lo que ha considerado que la protagonista “es ella” en un día “importante para una provincia que judicialmente es muy compleja y necesita personas con empuje como la de la nueva presidenta”.