La división en el seno de Ciudadanos en la provincia Málaga se visibilizaba este miércoles en forma de concentración, por parte de la Plataforma por la Regeneración de Cs. Una representación de unas cuarenta personas, entre militantes, exmilitantes, algunos cargos públicos del partido y simpatizantes, se reunió en la calle Alcazabilla de Málaga, frente al Teatro Romano, para leer un manifiesto firmado, según dijeron, por más de 250 personas.
Denuncian “falta de democracia interna” en la formación y exigen las dimisiones del secretario de Organización provincial, Vicente Sánchez, ‘número 3’ en la lista por Marbella, así como de la parlamentaria por Málaga y secretaria de Acción Institucional, Teresa Pardo.
Este colectivo pide la dimisión de los dos responsables provinciales o, en su lugar, el cese de los mismos por parte de la dirección nacional que preside Albert Rivera.
El encargado de leer el manifiesto fue Miguel Ángel Macías, quien fuera candidato en las primarias al Congreso de los Diputados, como rival del oficialista Guillermo Díaz, actual representante por Málaga en la Cámara Baja y también muy criticado en el acto.
“Queremos dar a conocer a la opinión pública y a la organización de este partido, el descontento, y por consiguiente la baja de muchos afiliados, debido a las actuaciones en algunos casos y la dejadez y poca capacitación en otros”.
Macías y quienes le han secundado sostienen que se dirigieron previamente por escrito al secretario de Organización a nivel nacional, Fran Hervías, para comunicarle esta situación y no obtuvieron respuesta alguna. Fue su último cartucho antes de elaborar el manifiesto y comparecer ante los medios de comunicación.
Los críticos aseguran que Cs, tras su última asamblea nacional, “perdió por completo la democracia interna”, al ganar poder sobre la militancia determinados dirigentes provinciales que se encargan de la organización diaria del partido.
Presencia de Francisco Gómez Palma
Entre los asistentes estaba el excoordinador de Ciudadanos en Marbella, Francisco Gómez Palma, quien este jueves se ha referido expresamente a la “ausencia de democracia interna”, así como a “una forma de gestionar el partido donde ha primado el servilismo y el adoctrinamiento y no se ha valorado, ni mucho menos, la valía personal, ni la trayectoria ni la capacidad, ni la preparación”.
En declaraciones a Onda Cero, Gómez ha lamentado que “no se haya respetado a las agrupaciones”, además de “haberse modificado listas en muchísimos sitios”. De ahí, ha añadido el empresario marbellí, “la debacle de los resultados en las municipales.
“Ciudadanos no es de nadie, es de todos, de todos aquellos que creen que Ciudadanos es un sentimiento, una forma distinta de hacer política, una política moderna y honesta. No somos ni de izquierdas ni de derechas, somos de centro, defendemos por encima de todo la excelencia en la gestión de lo público y la honestidad y la coherencia como señas de identidad. Somos gente que no vivimos de la política, políticos de vocación y convicción y no políticos de profesión”, se recalca en el documento.
Además, se muestran “hartos de la política tradicional donde prima el interés partidista y el personal por encima del interés general, donde el enchufismo y el oportunismo vencen al talento y al mérito, donde el trabajo en equipo se ve cercenado por las consignas entre bambalinas, de unos para beneficiar a otros por intereses particulares”.
“Los aquí presentes y los que no pudiendo estar han firmado este manifiesto, podemos hablar alto y claro, ya que no estamos en política por una nómina ni mucho menos por un cargo inmerecido sólo por figurar, no nos hace falta ni nos interesa”.
Sobre la provincia de Málaga denuncian que en Cs no hay una gestión de Recursos Humanos como tal: “No se realizan reuniones; no hay calendario de trabajo en común y fijación de objetivos, el trabajo en equipo no existe más allá de las agrupaciones y las bases”.
Además, añaden que “no hay preocupación alguna por conocer a sus afiliados y hacer una política de selección en busca del talento y las capacitaciones entre los afiliados”. En definitiva, aseguran los críticos, “la organización provincial de nuestro partido mira hacia otro lado, bien por intereses personales, o simplemente por ser personas incapacitadas, muy poco preparadas y sin experiencia alguna para ostentar estos cargos de responsabilidad”.
Todo lo anterior, añaden, “ha creado una desmotivación, un enfado y un desasosiego en muchísimos afiliados y en las bases, que tiene a día de hoy, difícil solución sino se acometen cambios de envergadura”.
Capítulo aparte merece el hecho de que “la dirección del partido en Málaga, “ante esta situación y los malos resultados obtenidos en la provincia, según las expectativas creadas, no ha hecho autocrítica alguna”, en referencia a las municipales de mayo, en comparación con las generales.
Desde la dirección provincial se ha optado por guardar silencio. Se da la circunstancia de que cuando se le preguntó el miércoles por esta plataforma al vicepresidente de la Junta, Juan Marín, líder regional de Cs, éste señaló que no tenía constancia de corriente crítica alguna en Málaga, si bien le pareció “sano” que haya diversidad de opiniones en su partido.