Marbella contará con una planta de transferencia de residuos de construcción y poda, y un punto limpio en una parcela municipal, situada en las inmediaciones del antiguo vertedero, que el Ayuntamiento cederá a la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental.
La alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz; la presidenta de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, Margarita del Cid; el delegado de Medio Ambiente del organismo supramunicipal, José Antonio Gómez; el concejal de Medio Ambiente, Manuel Cardeña; y el gerente de Urbaser en la zona, Óscar Naranjo, han visitado este jueves la planta de transferencia de residuos orgánicos.
En la citada visita, Muñoz ha recordado que el punto más cercano donde actualmente se pueden depositar este tipo de residuos inertes están en los municipios malagueños de Estepona, Coín o Mijas, “lo que ha provocado que hayan proliferado los vertederos incontrolados porque no había sitio en Marbella donde se pudieran dejar”.
Asimismo, ha explicado que se ha alcanzado un acuerdo a tres bandas –Ayuntamiento, Mancomunidad y la empresa Urbaser– para la puesta en marcha de las instalaciones, “con lo que damos una solución a un problema que se generó prácticamente hace casi dos años cuando se cerró la planta de tratamiento donde se depositaban los escombros y restos de poda”.
“Con este acuerdo damos salida a una situación a la que el anterior equipo de gobierno, o no le prestó atención, o no entendió el perjuicio que estaba causando para la imagen de la ciudad, los particulares y los transportistas”, ha remarcado.
También ha explicado que el acuerdo “no supone coste para el Ayuntamiento y que, una vez formalizada la cesión de la parcela a la Mancomunidad, ésta encomendará la gestión del servicio a Urbaser”, concesionaria de la gestión de residuos en la comarca.
Además, Muñoz ha indicado que “se agilizarán” los trámites para que pueda estar en funcionamiento en cuatro meses, avanzado que se crearán 15 puestos de trabajo “para los que se tendrá en cuenta la experiencia de la plantilla afectada por el cierre de la antigua planta de tratamiento”.
“Se prevé que las nuevas instalaciones gestionen unas 200.000 toneladas anuales de residuos que, una vez separadas, serán trasladadas a los puntos autorizados”, ha añadido.
Un servicio muy importante para la Costa del Sol
Por su parte, Del Cid ha remarcado que se trata de un servicio “muy importante” para la Costa del Sol y que con esta planta de transferencia y “gracias a la implicación de los ayuntamientos vamos a contar con una respuesta rápida y eficaz”, destacando que “se ha encontrado un lugar accesible desde cualquier punto de la Costa”.
En este sentido, Gómez ha detallado a que los vecinos “podrán tener un sitio cercano y con precios lógicos para poder tratar los restos de obras y escombros y cumplir con la legalidad”.
Por último, Naranjo ha indicado que se dará servicio a particulares y empresas que tengan que gestionar este tipo de residuos y que los costes “se abaratarán si se separan en origen”, ha concluido.