El viceconsejero de Salud Miguel Ángel Guzmán y el gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS), Diego Vargas, ambos dimitidos este miércoles. Foto de archivo Junta
En Navidad, casi a punto de finalizar el año, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, afronta este miércoles importantes dimisiones en la cúpula de la Consejería de Salud, en plena crisis por las listas de espera en los hospitales públicos. Dejan sus puestos el viceconsejero, Miguel Ángel Guzmán, y el hasta ahora gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS), Diego Vargas.
La noticia la adelantaba pasadas las 11 de la mañana El Periódico de España, luego confirmada de forma oficial por a Consejería de Salud. Desde el Ejecutivo autonómico del PP anuncian que el viceconsejero será relevado por María Luisa del Moral, médico y actual portavoz de Sanidad del PP en el Congreso de los Diputados. Por su parte, el director gerente del SAS será relevado por la gerente del Hospital Reina Sofía de Córdoba, Valle García.
Estas dimisiones se producen en un momento en el que el Gobierno andaluz se encuentra inmerso en una polémica por las listas de espera en Andalucía, siendo más de un millón de andaluces los que aguardan en una lista de espera en la sanidad pública. Son 203.000 las personas que se encuentran esperando para pasar a un quirófano, y en relación con las consultas externas, hay 841.000 pacientes en espera.
Tanto la oposición como las organizaciones sindicales han criticado esta situación, si bien la consejera del ramo, Catalina García, ha manifestado que “seguirán creciendo en todo el país mientras el Ministerio de Sanidad no aumente el número de plazas MIR”.
Recientemente el presidente de la Junta reconoció que el problema de las listas de espera le quitaba el sueño, al igual que la sequía. “Soy consciente de que tenemos problemas serios, problemas que agobian al Gobierno andaluz, les aseguro que dedicamos en cuerpo y alma a solucionarlos, hablo especialmente de las listas de espera”, expuso Moreno el pasado 29 de noviembre en el Parlamento andaluz, durante el debate sobre el estado de la comunidad.
El Ejecutivo de Moreno Bonilla afronta esta crisis de las listas de espera, unida a las dos dimisiones de este miércoles justo cuando el gasto sanitario, para 2024, alcanzará los los 14.246 millones de euros, un 3% más que en 20223 y un 44,8% más que en 2018. Los populares emplean siempre como referencia tal año. Se trata del último del gobierno que presidió la socialista Susana Díaz.
La puesta en funcionamiento diario del Servicio Andaluz de Salud (SAS) supondrá en 2024 una inversión de 39 millones de euros, con una plantilla de 121.577 efectivos, según la última estadística publicada por Salud (2022). El 30% del Presupuesto andaluz se destina a la sanidad.
Se da la circunstancia de que el 7,1% del PIB andaluz se destinará a sanidad en 2024 y habrá 556,8 millones de euros para nuevas inversiones.
Acuerdos marco con clínicas privadas
Como plan de choque el gobernante centrista anunció dos acuerdos marco con clínicas privadas que, según dijo, se iban a poner en marcha en enero y febrero para hacer frente a las listas de espera en operaciones quirúrgicas y pruebas diagnósticas.
Ante las críticas por los conciertos con la sanidad privada Moreno siempre ha defendido tal fórmula, por llevarse a cabo en el resto de comunidades autónomas, así como durante los gobiernos del PSOE en Andalucía: “La diferencia es que ahora los conciertos se hacen de modo transparente y no pagamos deudas; no pagamos más conciertos, sino que pagamos más”, recalcó el presidente.
