“Yo no voy a permitir más subordinación, ni más trato con desdén hacia Andalucía”. Contundente reacción del presidente de la Junta, Juanma Moreno, a la hora de responder, este jueves, desde el Parlamento andaluz al Gobierno de Sánchez y, más concretamente, a la vicepresidenta Ribera. Todo ello en relación con la proposición de ley de PP y Vox, aprobada este miércoles,que reordena suelos para la ampliación de regadíos en el entorno del parque nacional de Doñana.
La también ministra de Transición Ecológica tildó este miércoles de “señorito” al gobernante andaluz y llegó a hablar de Andalucía como “un rinconcito”, algo que ha molestado especialmente a Moreno Bonilla. Fuentes del PSOE andaluz reconocen que fue “un error” y “una equivocación” de Ribera hablar en tales términos.
El presidente andaluz ha reivindicado la “autonomía” de su comunidad frente al Ejecutivo central: “No va a venir nadie a decirnos a los andaluces, desde un ático del paseo de La Castellana, lo que podemos hacer con un mando a distancia”, ha respondido en alusión a la ubicación madrileña donde se encuentra la citada sede ministerial.
“A mí me molesta muchísimo esa superioridad con la que nos trata el Gobierno de España, como esos pobres andaluces… qué sabrán, esa esquinita que es Andalucía, qué sabrán ellos…” ha recriminado Moreno a Sánchez y sus ministros. El inquilino de Moncloa fue tajante este miércoles desde Burgos: “Doñana no se toca”, zanjó.
Las palabras del gobernante centrista han tenido lugar durante la sesión de control parlamentario, a la que se somete cada quince días. Como era de esperar Doñana ha sido el asunto estrella de la jornada y Moreno se ha reservado cualquier palabra al respecto antes de comparecer: “voy a hablar dentro”, decía ante una nube de periodistas minutos antes de entrar en el salón de plenos de la Cámara autonómica.