Podemos ha asegurado este miércoles que la ocupación de la Plaza de Los Naranjos por parte de las mesas de los restaurantes de la zona carece de informes jurídicos y cuenta con objeciones por parte del Interventor municipal.
La formación morada, a la que recurre el tripartito para sacar adelante la mayor parte de su acción de gobierno, ha señalado en una nota de prensa que el Interventor ha instado al tripartito a través de un informe que incluya, para su estudio, los nuevos condicionantes que rodean a la ocupación de la plaza en la ordenanza sobre la ocupación de la vía pública con carácter previo a la concesión de las nuevas autorizaciones de las mesas. Dichos estudios, según Podemos, no figura en el expediente.
El expediente tampoco recoge ningún informe de los servicios jurídicos, lo que, a juicio de la formación, “es llamativo al tratarse de un equipo de gobierno que para algunas cosas se ampara en la necesidad de innumerables informes mientras que otras se agilizan y ejecutan sin informes”.
Podemos ha asegurado que, de concederse las autorizaciones de connformidad con la distribución actual de las mesas en la plaza, evaluará la posibilidad de impugnar el acuerdo, dado que, según la formación que lidera pablo Iglesias, incumple las ordenanzas.
La distribución de la plaza, en la que se ubica el Ayuntamiento y es uno de los enclaves más emblemáticos del municipio, es una decisión unilateral que no cuenta ni con el acuerdo de los empresarios ni de la plataforma vecina ‘La Plaza es nuestra’, que exige que la zona central quedé completamente libre para el paso de los viandantes.
“Hay temas en los que el consenso y el querer quedar bien con todos es imposible y obliga a mojarse, que es a lo que hemos venido a la política”, ha apuntado la formación.
Podemos critica que el tripartito se haya “plegado” a los intereses de los hosteleros “pues la afirmación de dejar el espacio central libre de mesas es una falacia”.
“En Marbella, por alguna extraña rzón, han decidido que la única manera de cuidar el turismo es llenar todo de mesas de restaurantes en lugar de proteger y poner en valor nuestro patrimonio. Los costes de las obras de la plaza, la limpieza, la iluminación o el mantenimiento de la jardinería salen de los bolsillos de todos los vecinos”, ha indicado la formación.