El secretario de Organización del PSOE de Málaga, Cristóbal Fernández, ha anunciado este martes una campaña de los socialistas para informar sobre la reforma del Impuesto de Sucesiones en la región, explicar el compromiso del gobierno de la Junta, que preside Susana Díaz, en materia fiscal con los malagueños y para “desmontar los intentos de manipulación del PP andaluz sobre la tributación de las herencias”.
Tras el acuerdo alcanzado entre el PSOE y Ciudadanos en el Parlamento andaluz, el Impuesto de Sucesiones y Donaciones se ha reformado en la Comunidad Autónoma para lograr una mejor distribución de la carga fiscal, adaptado a la realidad social y económica actual y manteniendo su carácter progresivo, ha explicado Fernández en rueda de prensa, en la que ha estado acompañado por la parlamentaria andaluza Beatriz Rubiño y la viceportavoz socialista en el Ayuntamiento de Málaga Estefanía Martín Palop.
“Ha habido dos cambios concretos y sustanciales, la deducción automática al 99 por ciento en herencias o donaciones de explotaciones agrarias para facilitar el relevo generacional en este sector clave de la economía andaluza aún cuando no sea la agrícola su principal actividad”, ha dicho el secretario.
“Por otro lado, nuevas reducciones por herencia de vivienda habitual para parientes directos, que van desde un 95 por ciento para inmuebles con valor superior a los 242.000 euros al 100 por ciento para aquellas que valgan menos de 122.606 euros”, ha añadido Fernández. “Prácticamente, aquellas personas que hereden una vivienda habitual, desde el 1 de enero no pagarán casi nada”, ha concluido.
Reforma del impuesto de sociedades
La campaña socialista recuerda que el Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD) es un impuesto social que grava el lucro por haber recibido gratuitamente unos bienes sin haber desempeñado un esfuerzo personal para conseguirlos, del que están exentos el 93 por ciento de los andaluces por las bonificaciones que aplica la Junta de Andalucía.
Durante el ejercicio 2015 el número de declarantes por este impuesto fue de 267.553, de los que solo 19.487 tuvieron que pagar por el impuesto. Un total de 248.066 herederos tuvieron que liquidar el impuesto, pero no tuvieron que pagar nada, ha explicado.
Por otro lado, ha recordado que la renuncia a la herencia es “un fenómeno marginal”. En Andalucía, el porcentaje de renuncias declaradas por los notarios es de media solo el 1,4 por ciento de las defunciones acaecidas al año: 3.872 frente a 266.008 entre 2011 y 2014.
En comunidades donde gobierna el PP como la de Madrid, se produjeron 4.120 renuncias en 2015 y 3.118 renuncias de enero a septiembre de 2016. En Cantabria, también renunciaron a su herencia 477 herederos en 2015 y 367 de enero a septiembre en 2016. En ambas comunidades hay una bonificación del 99 por ciento de la cuota del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, ha concluido.