El Ayuntamiento de Málaga, a través del Área de Turismo y Promoción de la Ciudad, ha dado a conocer los resultados del estudio realizado para abordar la viabilidad de extender el periodo comercial de la ruta aérea Málaga-Nueva York y que abre la puerta a extender su periodo comercial de esta ruta aérea, según los resultados sobre satisfacción y uso de la ruta que se recoge en este sondeo.
Se trata de un estudio encargado por esta concejalía y desarrollado por el grupo de investigación Mediterráneo Económico dirigido por Elena Ruiz Romero de la Cruz, del Departamento de Teoría e Historia Económica de la Universidad de Málaga (UMA).
Los resultados de la investigación han puesto de manifiesto que prácticamente la totalidad de quienes usan la ruta, el 98 por ciento, consideran beneficioso el vuelo directo entre Málaga y Nueva York y aseguran que la utilizarían en caso de que se extendiera. Además, cuatro de cada diez emplearía esta ruta dos o más veces al año.
El vuelo directo que enlaza el aeropuerto de Málaga-Costa del Sol (AGP) con el aeropuerto internacional John F. Kennedy (JFK) en Nueva York comenzó a operar de forma estacional en 2008 y se reanudó la temporada de verano de 2017. Este año, la ruta estuvo operada por la aerolínea Delta Air Lines desde el 26 de mayo al 30 de septiembre, fechas entre las que un Boeing 757-200 con capacidad para 165 pasajeros, distribuidos en 30 asientos de primera clase y 135 asientos en clase turista, conectó ambas ciudades diariamente.
Entre agosto y septiembre de 2018 se llevaron a cabo en el área de salidas y el área de llegadas del aeropuerto una serie de encuestas a viajeros españoles y norteamericanos de esta ruta, con el fin de conocer el perfil de estos usuarios, la organización y motivación del viaje, el impacto sobre el destino y el nivel de satisfacción. El número de individuos encuestados ha sido de 410; el nivel de confianza es del 95 por ciento, con un margen de error del cinco por ciento.
El estudio revela que el aeropuerto de la ciudad de Nueva York funciona como hub de distribución de viajeros del medio-este y la costa este de EEUU hacia Málaga, y también por parte de los viajes de largo recorrido que tienen como destino final la Costa Oeste, que utilizan el hub del aeropuerto JFK de Nueva York como conexión hacia sus destinos.
El origen de los residentes nacionales que utilizan la ruta se sitúa mayoritariamente en la provincia de Málaga (la ciudad en el 43 por ciento de los casos y Marbella en el 15 por ciento). Por su parte, el contingente más importante de los residentes en los EEUU tiene residencia en la ciudad de Nueva York –44,8 por ciento de los usuarios del vuelo– pero el resto de los viajeros se reparte entre un gran número de estados que se distribuyen en el medio-este, con especial significación de Massachusetts, Indiana, Washington DC, Maine y Miami.
Perfil sociodemográfico
El perfil de los usuarios es el de licenciados universitarios que trabajan por cuenta ajena. Sin embargo, hay dos aspectos que presentan importantes diferencias en las características sociodemográficas entre ambas procedencias: la distribución por edades y el nivel de ingresos.
Mientras los residentes en España quedan definidos por el grupo de edad comprendido entre los 26 y 35 años en un 45 por ciento de los casos, esta franja de edad solo representa al 20 por ciento de los residentes en EEUU donde predominan los pasajeros con edades comprendidas entre los 46 y 55 años –un 26 por ciento–, una distribución similar a los grupos de 35-45 años (24 por ciento) y 26-35 años (20 por ciento).
En cuanto al nivel de ingresos, la mayoría de los norteamericanos, el 61,1 por ciento, declara ingresos superiores a los 60.000 euros anuales frente a solo el 6,9 por ciento de los nacionales que se sitúa en esos niveles. Por su parte, en el caso de los españoles los grupos de ingresos se reparten de manera homogénea con cuotas de en torno al 20 por ciento en las franjas de 15.000 a 25.000 euros, 25.000 a 40.000 euros y 40.000 a 60.000 euros.
Forma de viajar y motivación
La mayoría de los usuarios de la ruta viaja en pareja –un 48,3 por ciento de españoles frente a un 32,6 por ciento de norteamericanos– aunque entre los estadounidenses hay un mayor número de viajeros que lo hacen solos, –exactamente el 30,5 por ciento–, debido a un porcentaje más elevado de desplazamientos por negocios. Precisamente, a partir de septiembre se observa un aumento de los visitantes de negocios, que suman un 7,8 por ciento. No obstante, la principal motivación del viaje es en ambos casos vacacional.
Entre los viajeros de los EEUU, el sol y la playa es la principal motivación (37,6 por ciento), el 29,1 por ciento viene a España para realizar turismo cultural, y un 13,5 por ciento tiene como motivación visitar familiares y amigos. Cabe destacar la importancia de los eventos: en concreto, la World Senior Masters Athletics Championships atrajo a un nutrido grupo de atletas.
La motivación de los viajeros nacionales que vuelan a Nueva York es el turismo cultural (36,9 por ciento), las compras (30,8 por ciento) y el turismo de ciudad (23,8 por ciento).
Canal de información y compra
Por otro lado, una de las principales diferencias entre los usuarios españoles y los norteamericanos se da respecto al canal de organización y la compra del viaje. Mientras que el 89 por ciento de los residentes en los EEUU se informaron a través de Internet, el grupo de viajeros nacionales lo hizo en el 36,8 por ciento de los casos a través de agencia de viajes, un hecho que se ve reflejado en el canal de adquisición de los pasajes de avión y las reservas hoteleras.
El 91,7 por ciento de los viajeros de los EEUU realizó la compra de los billetes y el 88,5 por ciento de las reservas hoteleras por Internet. Sin embargo, prácticamente la mitad de los pasajeros españoles recurrió a las agencias de viajes.
Estancia media, alojamiento y gasto medio
Por otro lado, los usuarios de esta ruta tienen una estancia media prolongada. La mitad de los nacionales permanece una semana en el destino, mientras que el 43,9 por ciento lo hace más de una semana. Solamente en el 5,3 por ciento de los casos se reduce a una estancia de entre uno y cuatro días. Por su parte, los norteamericanos se quedan en España más de una semana (54,3 por ciento), un 34,8 por ciento lo hacen durante una semana, y un 10,9 por ciento está entre uno y cuatro días, generalmente aquellos que viajan por motivos de trabajo.
El alojamiento mayoritariamente elegido, tanto por los viajeros americanos como por los españoles, son hoteles de 4 y 5 estrellas. Una cuarta parte de los viajeros norteamericanos se alojan en casa de amigos o familiares cifra similar a los usuarios españoles de apartamentos turísticos.
Por su parte, el gasto medio sin alojamiento y vuelo declarado por los españoles en su visita a Nueva York es superior al de sus homólogos: un 29,3 por ciento de los nacionales hace un gasto entre 101 y 200 euros frente a un 17,7 por ciento de norteamericanos situados en esa franja. La mayor parte de los visitantes de los EEUU, el 26 por ciento, tiene un gasto medio de entre 81 y 100 euros diarios, y el 19,8 por ciento de 61 a 80 euros.
Satisfacción con destino y ruta
El estudio pone de manifiesto un altísimo grado de satisfacción por parte de los usuarios norteamericanos tanto con el destino como con la visita. El 100 por ciento de las valoraciones son positivas y casi el 85 por ciento de los visitantes otorgan la puntuación máxima. Asimismo, el 99 por ciento de los visitantes recomendaría el destino y el mismo porcentaje asegura que repetiría la visita.
Finalmente, prácticamente la totalidad de quienes usan la ruta, el 98%, consideran beneficioso el vuelo directo entre Málaga y Nueva York y la misma proporción asegura que la utilizarían en caso de que se extendiera todo el año.