“Voy a confesar que yo votaba hasta ahora al partido liberal, pero el partido liberal ha dejado de existir”. Nada menos que un premio Nobel como Mario Vargas Llosa, uno de los emblemas mundiales del liberalismo, del que hace bandera allá donde va, ha firmado este jueves en Sevilla su particular sentencia de muerte política para aquella formación brillante que fundara Albert Rivera, Ciudadanos, convertida hoy en una mala copia de lo que fue.
El célebre escritor peruano participa en una de las mesas redondas de la Convención del PP, que en esta jornada ha reunido juntos también al opositor venezolano Leopoldo López y al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno.
Vargas Llosa ha elogiado con creces la figura política de Pablo Casado, así como su trayectoria hasta el momento, al tiempo que ha augurado que se convertirá en presidente del Gobierno tras las próximas elecciones generales, comicios en los que “votaré al Partido Popular”. En ese momento el auditorio se ha puesto en pie para dedicarle una cerrada ovación, con el presidente de la formación conservadora en primera fila.